José Apezarena

Podemos, domesticado

Cuando saltó al primer plano, el fenómeno Podemos asustó a no pocos. El lenguaje, las actitudes, el estilo, las propuestas, sus movimientos, las movilizaciones callejeras... impactaron sobremanera.

Entre los más impresionados se encontraban, sin duda, los grandes empresarios de este país, a los que inquietó el modelo económico que propugnaba la nueva formación, concretado, negro sobre blanco, en el programa maximalista y extremoso elaborado para las elecciones europeas.

Sospechas sobre financiación, mimetismo con los regímenes bolivarianos, cercanía y contactos con sectores independentistas, violencia callejera en no pocas de sus convocatorias, constituyeron elementos añadidos que no contribuían precisamente a tranquilizar a nadie.

¿Qué ha ocurrido desde aquellos estremecedores inicios? Que Podemos ha virado de forma clara hacia ámbitos ideológicos mucho más centrados, hasta el punto de declararse socialdemócratas. Y que ahora se miran en los países nórdicos como modelo de país que propugnan. A lo que hay que añadir la moderación en las formas y hasta la desmovilización callejera, que prácticamente ha desaparecido.

Pero, sobre todo, lo que ha acontecido es que el movimiento de Pablo Iglesias, se ha convertido en un partido. Mejor dicho, un partido "normal". O sea, un grupo político que asume las normas y no pretende romperlas, que juega en las urnas y no fuera de ellas, que respeta al máximo la legalidad, que se esfuerza por no dar miedo precisamente para evitar una fuga de votos...

Un partido, además, que ahora, tras las últimas elecciones, tendrá que pactar con otras fuerzas, y por tanto deberá ceder para poder decidir en la constitución de ayuntamientos y autonomías. Y que va a gobernar en algunas grandes ciudades, de cuya gestión deberán responder ante los administrados y ante la opinión pública.

En fin, que, expresado de forma algo cruda, Podemos se ha domesticado. Lo cual, dicho sea de paso, es buena noticia para todos. También para ellos.

Y, de resultas, aquellos escalofríos de los comienzos han dejado paso a una sensación de cierta tranquilidad a nivel político, y también en los sectores económicos. Eso sí, una tranquilidad expectante todavía.

editor@elconfidencialdigital.com

 

Twitter: @JoseApezarena



Portada
Comentarios
Envíanos tus noticias
Si conoces o tienes alguna pista en relación con una noticia, no dudes en hacérnosla llegar a través de cualquiera de las siguientes vías. Si así lo desea, tu identidad permanecerá en el anonimato