José Apezarena

Trapero se libra de acabar en Soto del Real

Cuando se conoció que Josep Lluis Trapero había sido citado en la Audiencia Nacional acusado de sedición, y que la titular del juzgado era Carmen Lamela, una magistrada calificada como "dura", no faltaron quienes pronosticaron que el jefe de los Mossos d'Esquadra acabaría en prisión sobre la marcha.

No ocurrió tras su primera visita a Madrid, de la que salió citado para una segunda comparecencia porque tenían que recibirse nuevos testimonios.

Ayer pareció de nuevo que iría a la cárcel directamente, al trascender que el fiscal pedía prisión incondicional por la pasividad de la policía autonómica en los incidentes del 20 de septiembre, y también durante la jornada del 1-O.

Se afianzó más esa impresión por la mañana, al verle presentarse en sede judicial, no vestido de uniforme, como la primera vez, sino de paisano. Por lo visto, el propio Trapero no las tenía todas consigo.

Algunos analistas siguieron insistiendo en la hipótesis de la prisión inmediata cuando la magistrada le citó para las seis de la tarde. Abogados penalistas escribieron en Twitter que esas citaciones solían acabar con el afectado camino de Soto del Real.

No ha ocurrido así. El mayor de los Mossos d'Esquadra ha esquivado la prisión, aunque verá limitada su libertad. La juez Lamela le ha prohibido salir de España, le ha obligado a entregar el pasaporte, y tendrá que comparecer en el juzgado cada quince días. Por supuesto, la magistrada le ha advertido de que su situación puede variar (a peor) si incumple alguna de estas medidas.

Durante la sesión, la secretaria judicial del juzgado de instrucción número 13 de Barcelona relató que tuvo que abandonar la Consejería de Economía por la azotea, cuando el inmueble se encontraba rodeado por una masa de independentistas y los Mossos d'Esquadra estaban de brazos cruzados.

Es bastante fuerte que el jefe de una policía autonómica, como son los Mossos d'Esquadra, esté siendo investigado por sedición, que le hayan retirado el pasaporte y que tenga que acudir al juzgado cada dos semanas.

Pero más fuerte habría sido verle ingresar en Soto del Real. Algo, sin embargo, que no está descartado definitivamente.

 

Lo que sí parece claro es que su condición de máximo responsable del cuerpo autonómico tiene los días contados. Salvo que Puigdemont dé marcha atrás este jueves, notifique que no proclamó la independencia de Cataluña, y con ello se paralice la puesta en marcha del artículo 155 de la Constitución.

Pero, en estos momentos, yo no veo a Puigdemont bajándose de la burra.

editor@elconfidencialdigital.com

En Twitter @JoseApezarena

Portada
Comentarios
Envíanos tus noticias
Si conoces o tienes alguna pista en relación con una noticia, no dudes en hacérnosla llegar a través de cualquiera de las siguientes vías. Si así lo desea, tu identidad permanecerá en el anonimato