Maléfica Tania
El relato de La bella durmiente alcanzó fama universal con la versión de los hermanos Grimm. Pero fue la productora Walt Disney la que lanzó al estrellato a Maléfica, la reina y hada perversa del clásico cuento infantil.
En mayo del año pasado, llegó a las pantallas de cine la última versión, encarnada por Angelina Jolie, en la que una maravillosa niñita, de corazón puro, vivía en un reino de ensueño, casi perfecto, de ideales nobles y amistades eternas.
Sin embargo, un buen día, aquella paz idílica se truncó. Una cruel traición endureció su corazón hasta convertirlo en una piedra.
Qué quieren que les diga. Ha sido asistir a la tormenta perfecta que acaba de desatar Tania Sánchez en Izquierda Unida y venirme a la cabeza esta historia. La dulce Tania, de noble alma y pacífico transitar, parece transformada. Ha dado un golpe de mano que acaba de abrir una vía de agua en IU de considerables proporciones.
Hay quien dice que ha sido una maniobra perfectamente calculada. Tania pierde ahora el aforamiento, alarga así el proceso judicial en el que está inmersa por el caso Rivas Vaciamadrid y puede presentarse –limpia de polvo y paja- a las autonómicas. Pero es muy probable que ésta sea una maléfica interpretación de la realidad.
El filme de Walt Disney salió algo tétrico y violento para ser una creación dirigida a los más pequeños. Pero era certero en la crítica a la codicia y la deslealtad.
Ahora a Tania sólo le falta volar.
Más en twitter: @javierfumero
