Javier Fumero

La pena de Rajoy por Rubalcaba

Me cuentan que estos días, Mariano Rajoy se encuentra algo apesadumbrado. El motivo es que el presidente del Gobierno pierde a un interlocutor con el que se entiende muy bien. Estos días de tan difícil digestión lo ha vuelto a constatar.

Lo he contado en alguna otra ocasión. Rubalcaba y Rajoy se llevan mucho mejor de lo que algunos piensan. Han hablado mucho estos últimos años, de forma discreta. Charlan, intercambian impresiones, pactan acuerdos, acercan posturas...

En ocasiones, utilizan mensajeros, personas interpuestas. Pero otras veces descuelgan el teléfono y se dejan de intermediarios.

No sólo negocian cuestiones de gobierno, como las personas que van a integrar el nuevo Consejo General del Poder Judicial, la reforma energética o un plan para frenar las cláusulas suelo. Es eso y mucho más.

Recuerdo un dato importante: el pasado mes de octubre (ya nos hemos olvidado) Rajoy y Rubalcaba sellaron un pacto secreto sobre Cataluña: nunca aceptarán un referéndum independentista.

La alianza se cerró en conversaciones telefónicas realizadas sin luz ni taquígrafos. Los dos líderes acordaron, de forma discreta, una hoja de ruta para rechazar cualquier propuesta de CiU. El objetivo final es, en última instancia, la caída de Artur Mas.

El batacazo del PSOE en las elecciones europeas, el pasado 25 de mayo, provocó otra llamada relevante, personal y de confianza, entre los dos protagonistas. Rajoy le pidió que no se marchara, que España necesitaba estabilidad en estos momentos. Ambos sabían la marejada que se nos venía encima. Pero Rubalcaba no podía soportar más la presión interna y le confirmó que abandonaba.

Días después llegó la noticia de la década: el Rey abdica. El delicado proceso que se inició ese día, un poco a marchas forzadas, se ha llevado con una pulcritud exquisita por parte de los dos políticos. Ellos han hablado mucho y pactado hasta el más mínimo detalle. Se trata de un momento histórico y no se ha querido dejar nada sin atar.

Ahora, cuando la tempestad está amainando, Rajoy comienza a echar de menos a Rubalcaba. Antes incluso de que haya hecho las maletas. Y –me dicen desde su entorno- es un sentimiento sincero.

 

Más en twitter: @javierfumero


Portada
Comentarios
Envíanos tus noticias
Si conoces o tienes alguna pista en relación con una noticia, no dudes en hacérnosla llegar a través de cualquiera de las siguientes vías. Si así lo desea, tu identidad permanecerá en el anonimato