El S-80 sale a flote tras superar su último obstáculo
Se acaba de aprobar en Cartagena la Critical Desing Review (CDR) que afirma la viabilidad del proyecto
Navantía y la Armada española han estado reunidas durante esta primera quincena de julio, en la que se ha llevado a cabo la CDR exitosamente. Una de las conclusiones: aún faltan cuatro años para que se ponga a flote el primer submarino de la serie, y al menos cinco más para que se le entregue a la Armada el S-81 P. El siguiente paso es “hacer un submarino” y para ello Navantía ha decidio crear un nuevo equipo de ingenieros para llevar por el buen camino la línea de producción.
Durante estas dos primeras semanas de julio el submarino S-80 ha pasado la denominada Critical Desing Review (CDR) con éxito. La Armada española ha dado su visto bueno para la construcción de los submarinos de la serie S-80 Plus. A pesar de los graves problemas que habían tenido hace unos meses estos buques, el proyecto finalmente, sigue adelante.
Ahora que el proyecto está aprobado se han fijado nuevos plazos de entrega. Según ha sabido El Confidencial Digital, se tiene previsto que el primer submarino de la serie S-80, el Isaac Peral, se ponga a flote en el año 2020 y no será hasta pasado un año (2021), como mínimo, cuando se le entregará a la Armada. Desde la dirección de Navantia reconocen, que al tratarse de un proyecto I+D es posible el retraso en alguno de los plazos preestablecidos.
El siguiente paso tras haber superado la CDR es la construcción del submarino. En esta fase, los ingenieros de Navantia, a pesar de los graves problemas por los que ha atravesado el proyecto, tienen algo de ventaja. El casco resistente diseñado para el anterior S-81 será reutilizado para esta primera unidad de la serie S-80 Plus.
Además, el conflicto ocasionado por la quiebra de la empresa encargada de la construcción de los sistemas de propulsión AIP (independientes al aire), está solucionado. Estos sitemas son la gran novedad que añade un valor añadido a los buques y por un momento se creía que no formarían parte del proyecto final. Pero fuentes de Navantia aseguran a ECD, que son parte fundamental de los submarinos y que por este motivo se les buscará una nueva ubicación dentro del mismo.
Navantia afirma por tanto, que es necesaria una reestructuración de la línea de producción. Es decir, van a llevar a cabo una reforma del equipo de ingenieros encargados de la construcción de los submarinos. Quieren crear un equipo potente, donde los más jóvenes formen el grueso de la construcción del S-81 P y esta a su vez, esté liderada por veteranos que supervisen el proyecto. Las posibles contrataciones comenzarán una vez pasado el verano a la vez que la construcción del primer buque.
