José María Roldán, González Páramo y Juan José Toribio, los nombres que maneja el Gobierno para dirigir el Banco de España. Prácticamente descartados, Elvira Rodríguez, Caruana y Sainz de Vicuña

Según ha podido saber El Confidencial Digital, de fuentes del Gobierno, Rajoy busca un “perfil técnico y no político” para este puesto, consciente de la batalla a librar en los próximos meses en Europa a favor de la banca española.

Y así se lo ha transmitido al ministro de Economía, Luis de Guindos, a quien ha encargado ya que le presente una terna de candidatos, con estas características, en las próximas semanas. También quiere que las sinergias entre el equipo económico del Gobierno y el nuevo Gobernador del Banco de España sean más que potentes.

El candidato mejor situado: José María Roldán

Uno de los mejor posicionados en la carrera para sustituir a MAFO es un hombre de la ‘casa’, José María Roldán, experto en temas bancarios y, sobre todo, en supervisión.

Según las fuentes financieras, consultadas por ECD, Roldán se mueve muy bien en los terrenos próximos al Banco Central Europeo (BCE). Y esa es la plaza que Rajoy quiere cuidar ahora especialmente, y con la que quiere mantener una interlocución fluida.

Pero ese no es su principal activo. Es una persona próxima al PP, con muy buenas relaciones con la cúpula económica del Gobierno, es decir, tanto con el equipo que encabeza Luis de Guindos como el que dirige Cristóbal Montoro. Habla varios idiomas y, además, le genera simpatías la reforma financiera que está impulsando, ahora mismo, el Ejecutivo.

González-Páramo

También está encima de la mesa del ministro de Economía el nombre de José Manuel González-Páramo como otro de los candidatos para dirigir el Banco de España. Según fuentes del Gobierno, tres son los potenciales que Rajoy ve en el todavía miembro del Consejo Directivo del BCE:

1. Su fluidez a la hora de establecer conexiones con el BCE, organismo que abandonaría tan solo dos meses antes de dar el ‘salto’ al Banco de España. Esta situación le dotará de excelentes puentes e interlocución difícilmente superable con el supervisor europeo.

2. Apoya las medidas del ministro De Guindos en la reforma del sector financiero. Es de los partidarios de que los bancos españoles mejoren su solvencia y sean más competitivos a través de las fusiones.

3. Que su procedencia sea el Banco Central Europeo quiere ser aprovechado por el Gobierno para dar un plus de prestigio internacional al supervisor español, sumido ahora en una profunda crisis de credibilidad.

Por el contrario, le ‘penaliza’ el hecho de que, en algunos sectores del PP, se le critique en privado por no haber estado al lado del partido y de Rajoy en los ocho duros años de oposición.

Juan José Toribio

El nombre de Juan José Toribio, profesor del IESE, es otro al que le está dando vueltas el Gobierno. Y piensan en él, sobre todo, porque sería un perfil que el PSOE podría encajar perfectamente.

Rajoy, según fuentes próximas al PP, tiene previsto consensuar el nombre del subgobernador del Banco de España con el PSOE, después de que el ex ministro Pedro Solbes rompiera esa tradición de pacto con el principal partido de la oposición con la designación del actual número dos del supervisor.

Y es ahí donde Toribio juega una baza fundamental para el Gobierno. Rubalcaba no pondría ‘pegas’ a su nombre. Fue uno de los expertos en los que se apoyó Zapatero para dar soluciones a la crisis económica durante su estancia en La Moncloa.

Pierden posibilidades

La portavoz de Economía del PP en el Congreso, Elvira Rodríguez, parece contar ahora con menos posibilidades. Mariano Rajoy le reserva un puesto importante para los próximos meses, pero parece no estar llamada a dirigir el Banco de España. Se le quiere para un cargo de gestión, más que de supervisión, como podría ser el Tribunal de Cuentas.

Según fuentes bancarias, desde el entorno próximo a Rodrigo Rato y José María Aznar se está impulsando también la candidatura del que ya fuera Gobernador hasta 2006, Jaime Caruana. Sin embargo, el propio Caruana no quiere dejar su cargo como director general del Banco Internacional de Pagos.

Tampoco el Gobierno está dispuesto a que España pierda un cargo internacional de tanta relevancia. Prefiere que Caruana agote allí su mandato, que vence en 2014.

Otro de los candidatos que ha barajado el Ejecutivo es el de Antonio Sainz de Vicuña. Sin embargo, el ministro De Guindos quiere ‘volcarlo’ en la lucha para reemplazar a González Páramo en el BCE. Y no sería beneficioso que compitiera, a la vez, por el sillón del Banco de España.