Insólita presentación de resultados en sábado

Bankia empuja al resto de la banca a abrir por las tardes: atiende a 12.000 clientes al día

El 40% de las operaciones de las ‘oficinas ágiles’ implantadas por Goirigolzarri se realizan en horario vespertino. Planea la apertura de más sucursales de este tipo

José Sevilla, consejero delegado de Bankia, y José Ignacio Goirigolzarri, presidente.
José Sevilla, consejero delegado de Bankia, y José Ignacio Goirigolzarri, presidente.

Bankia va camino de forzar al resto de la banca a abrir las sucursales por la tarde. Los resultados cosechados por la entidad que preside José Ignacio Goirigolzarri durante el año y medio de aplicación del horario vespertino se traducen en que más de 12.000 clientes acuden ya a las sucursales después de comer.


Según los cálculos del propio equipo de Bankia, cada día son atendidos personalmente en las llamadas ‘oficinas ágiles’ alrededor de 35.000 clientes.

Este modelo ha permitido, explican en la dirección de la entidad, agilizar las operaciones tradicionales, y ha acumulado el 25% de las transacciones por la tarde llegando a alcanzar picos de hasta el 40%. Esto significa que casi 12.000 clientes de media acuden ya a las sucursales después de comer.

Estas oficinas están colocadas en las zonas donde Bankia tiene una elevada densidad de clientes y de red. Trabajan conjuntamente con sucursales cercanas que prestan servicios de asesoramiento y venta de productos más elaborados.

Bankia considera además que abrir también el resto de oficinas en este horario vespertino es un tema a estudiar, aunque, en este momento, no está todavía encima de la mesa.

Hasta ahora, solo cuatro bancos (Evo Banco, ING, Kutxa) se han decidido a abrir por las tardes a diario. El último en sumarse fue Bankia hace año y medio. Anunció la puesta en marcha de ‘oficinas ágiles’ en zonas urbanas y céntricas, con horario ininterrumpido desde las 08:15 a las 18:00.

Daño de imagen por las ‘tarjetas black’

El presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, aprovechó la presentación de resultados de la entidad en 2014, celebrada de manera insólita un sábado a la espera de un acuerdo con el FROB para decidir quién asumía el coste de las indemnizaciones por la salida a Bolsa, para reconocer públicamente que la imagen de la entidad se está viendo salpicada por actuaciones del pasado, como el escándalo de las tarjetas opacas de Caja Madrid.

Pero realizó una contundente defensa de la gestión de su equipo y trazó una línea divisoria entre la antigua Caja Madrid y la Bankia con Rodrigo Rato al frente y la que él comenzó a liderar en 2012.

“Fuimos muy conscientes de los efectos que iba a tener en términos de imagen, pero no dudamos del camino que teníamos que seguir: profesionalidad y transparencia”, destacó el banquero.

Goirigolzarri no se ha planteado dimitir

Goirigolzarri explicó que no habían existido tensiones con el FROB, el Ministerio de Economía y el de Hacienda, a la hora de decidir cuánto dinero y en qué proporción debía provisionarse para hacer frente a futuras indemnizaciones por la salida a Bolsa.

 

En su opinión, el acuerdo alcanzado es “positivo, riguroso y conservador”. Matizó que la provisión de 780 millones de euros se ha realizado teniendo en cuenta las pérdidas potenciales a las que tendrían que hacer frente BFA y Bankia tanto para devolver las acciones, costear los intereses de demora y las costas judiciales.

También negó que hubiese planteado su dimisión si no se llegaba a un acuerdo satisfactorio para la entidad. Tampoco se plantea que vaya a ser imputado por el juez Andreu, después de que los informes de los peritos del Banco de España concluyesen que existían irregularidades en las cuentas reformuladas por el nuevo equipo.

Dardo envenado a Cristóbal Montoro

El presidente de Bankia no perdió la ocasión, tal y cómo se adelantó a principios de esta semana en ECD, para enviar un recado a algún miembro del Gobierno. “Sólo los que no están alineados con los contribuyentes pueden discrepar de que hay que salvaguardar el valor de la entidad”.

“Desear que a Bankia le vaya mal es desear que al contribuyente le vaya mal”, aseguró durante la presentación de resultados, en referencia a la pretensión de Cristóbal Montoro – al que no citó expresamente- de que Bankia asumiera todo el coste de las posibles demandas por la salida a bolsa.

Consideró que mantener la incertidumbre sobre Bankia complica la devolución de las ayudas públicas. Recordó que el 62% del beneficio y del dividendo corresponden a BFA “y, por tanto, al contribuyente”.

Gana 747 millones en 2014, un 83% más

Bankia obtuvo un beneficio neto atribuido de 747 millones en 2014, un 83% más que un año antes, tras provisionar 312 millones por las indemnizaciones de la salida a Bolsa y reducir el beneficio de 2013 con la dotación extraordinaria al Fondo de Garantía de Depósitos.

La entidad ha decidido repartir un dividendo en efectivo de 202 millones de euros, de los que 126 millones serán cobrados por su matriz, BFA, participada íntegramente por el Estado. Eso supone un pay-out del 27% del beneficio.

El resultado del grupo BFA se queda en 418 millones de beneficio neto, tras la provisión de 468 millones en BFA y de 780 en el total del grupo por la contingencia de la salida a Bolsa. Eso supone una diminución del 80,8% del beneficio respecto a 2013.

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