El Consejo Regulador del Cava ‘corteja’ a José Montilla, tras el fracaso con el primer tripartito durante el boicot, y reclama ayudas a la exportación

El boicot al cava catalán, al que se llamó desde ciertos sectores en la etapa de tramitación del nuevo estatuto catalán, fue la causa del acercamiento desde el Consejo Regulador del Cava a la Generalitat del primer Tripartito. Ahora se está produciendo una segunda aproximación, reclamando ayudas.

En 2005, desde algunos sectores sociales se llamó al boicot contra el Cava Catalán como respuesta a la tramitación del nuevo estatuto de Cataluña que reflejaba el término “realidad nacional”. A raíz de dicha llamada, desde el Consejo Regulador del Cava se realizaron peticiones al entonces Tripartito de Maragall solicitando fondos del Govern para costear una campaña de marketing exterior. La solicitud no llegó a buen puerto.

Las dificultades que encontraron entonces los productores de cava procedían de los recelos que en algunos sectores del Govern, como ERC, provocaban la tradicional adscripción de muchas de estas familias a ideologías conservadoras. Desde el cava se intentaba recabar apoyos nacionalistas ante el ataque “español”, pero desde los sectores más nacionalistas de la Generalitat se les ignoró.

El Confidencial Digital ha podido saber ahora que, tras las elecciones y la formación de ‘La Entesa’, ciertas familias propietarias de bodegas productoras de cava están buscando acercamientos al presidente del Ejecutivo catalán, José Montilla, para lograr apoyo para afrontar la supuesta bajada de ventas provocadas por las citadas campañas de acoso contra el producto que comercian.

Las fuentes políticas en Cataluña consultadas por ECD sostienen que desde las familias Torres y Codorniú, se han pretendido acercamientos al President para lograr algún tipo de ayuda para superar la merma de ingresos. En 2006 los empresarios del Cava dieron por superada la crisis del boicot al aumentar sus ventas un 6% en los primeros nueve meses de 2006 y estar a punto de alcanzar el récord de los 100 millones de botellas.

A esto se suma el hecho de que el número de botellas comercializadas en los tiempos más duros de la campaña contra el Cava no fue muy diferente al de años precedentes.

Así quedó de manifiesto en la respuesta dada en agosto de 2005 por el Gobierno a la pregunta escrita presentada al Congreso por el diputado Joan Herrera acerca del “número de botellas que han sido comercializadas, o lo que es equivalente, de contraetiquetas que han sido expedidas por el Consejo Regulador del Cava durante los últimos cinco años, a cada una de las empresas elaboradoras de cava inscritas en el Registro 4 de la Denominación”.

La respuesta puede verse en la siguiente tabla gráfica explicativa:

 

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