La agenda de Rajoy para sacar adelante los Presupuestos: se aprobarán a mediados de octubre
Cristóbal Montoro los presentará ante el Consejo de Ministros el 31 de julio y los enviará al Congreso el 4 de agosto para iniciar el debate en el Pleno la última semana del mes
Mariano Rajoy perfila estos días con su equipo en La Moncloa el calendario que le llevará ya hasta la decisión final de la fecha concreta de las elecciones generales, pero que pasa inevitablemente este año por la tramitación de los Presupuestos Generales del Estado, que le impedirán disolver las Cortes antes de que sean aprobados definitivamente.
Según ha sabido El Confidencial Digital de fuentes con acceso a La Moncloa, el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro ha recibido ya la orden del presidente, aunque no definitiva, de tener listas las cuentas públicas para el último viernes de julio, día 31, para que puedan ser sometidas ese día, como muy tarde, a debate en el Consejo de Ministros.
La semana siguiente, el martes 4 de agosto, Montoro se dispondrá a remitir los Presupuestos al Congreso, en un acto de entrega insólito del famoso pendrive al presidente de la Cámara de Baja en pleno mes de vacaciones.
Tras unos diez días de receso, la tercera semana de agosto, que comienza el día 17, comenzarán ya las comparecencias de los altos cargos de cada ministerio en las distintas comisiones para defender las cuentas de sus departamentos.
Los Presupuestos llegan al Pleno el día 25
A continuación, el Gobierno está cerrando ya también las fechas para la tramitación como tal de los Presupuestos en el Congreso. En principio, se piensa fijar la celebración del debate de totalidad del proyecto de cuentas públicas en la última semana de agosto, con el 25 y 26 como fechas posibles para la toma en consideración por el pleno.
Con esa agenda, para que el proyecto pueda completar el recorrido por el Congreso, la tramitación del Senado y la aprobación definitiva de nuevo por el pleno de la Cámara baja, la votación se aproximará a la primera quincena de octubre.
Así, en este momento, la primera opción del presidente para la disolución de las Cortes es el 20 de octubre, que es la fecha que aseguraría la celebración de las generales 54 días después, como marca la ley, el 13 de diciembre.
La fecha del 29 de noviembre parece descartada
La otra fecha que se había barajado en Presidencia, la del 29 de noviembre, ha sido ya prácticamente descartada. Según los cálculos del Gobierno, este escenario obligaba al presidente a firmar el decreto de disolución de las Cortes el 7 de octubre.
Esta opción dejaba poco más de mes y medio de margen para la tramitación de los Presupuestos. Desde el ministerio de Hacienda se indicó a La Moncloa que eran necesarios, como mínimo, dos meses para su aprobación. Ese dato servía al presidente para decidir entre qué fechas concretas podía disolver las Cortes y convocar los comicios.
Menos de ese tiempo se consideraba un plazo extremadamente breve y precipitado, según explican también fuentes parlamentarias consultadas por ECD, que recuerdan que en cualquier ejercicio ordinario se invierten unos dos meses y medio para aprobar las cuentas del Estado.
