Shlomo Ben Ami y Fainé, las dos bazas de Gas Natural para conservar su filial en Colombia
El ex embajador israelí y el presidente de la eléctrica tienen abierta una línea de diálogo con Juan Manuel Santos. Si hay un cambio regulatorio, la compañía volverá a invertir
Isidro Fainé mantiene todavía abierta una línea directa de diálogo con el presidente Juan Manuel Santos para llegar a una solución pactada pese al anuncio de liquidación de Electricaribe, la filial de Gas Natural en Colombia. Su prioridad es apostar por un canal de conversaciones que pueda servir para llegar a un acuerdo antes de acudir al Ciadi.
De hecho, tal y cómo se ha publicado en las últimas horas, Gas Natural intentó in extremis alcanzar un pacto antes de que venciera el plazo legal de la intervención.
La dirección de la compañía, encabezada por el presidente, Isidro Fainé, se reunió en Bogotá este lunes con el ministro de Minas y Energía, Germán Arce, y el de Hacienda, Mauricio Cárdenas, para manifestar su intención de llegar a una solución acordada antes de que el Gobierno de Colombia decidiera ordenar la liquidación de Electricaribe.
Shlomo Ben Ami ha entrado en escena
No solo Fainé está protagonizando estas conversaciones al más alto nivel. En paralelo, según ha podido saber El Confidencial Digital por fuentes conocedoras de los contactos, el ex embajador israelí, Shlomo Ben Ami, también está participando en las gestiones discretas con miembros del Gobierno y el propio presidente Juan Manuel Santos.
Ben Ami es uno de los principales asesores de Santos en el proceso de paz con las FARC, como vicepresidente del Centro Internacional de Toledo por la Paz. Hay que recordar ahora que fichó en enero por la Fundación Bancaria La Caixa, presidida también por Isidro Fainé, donde sustituye al magnate mexicano Carlos Slim.
Hasta el momento, el ex ministro de Asuntos Exteriores israelí no había entrado en escena, a pesar de que el conflicto se recrudeció en noviembre con la intervención de la filial colombiana. Pero esta era la última bala que se reservaba la cúpula de Gas Natural para tratar de salvar su permanencia en el país. Fainé ya visualizó estas posibles gestiones de Shlomo Ben Ami cuando le incorporó a La Caixa.
En esa puerta que se ha dejado abierta, Fainé y Ben Ami han conseguido un compromiso de Colombia para mantener un diálogo que logre un acuerdo que, dotando a la empresa de un marco jurídico adecuado, establezca la necesaria regulación jurídica y económica que le permita continuar operando Electricaribe, y ejecutar a cambio las inversiones convenientes.
La nacionalidad española del ex embajador
Cabe destacar también que el Consejo de Ministros, a propuesta del ministro de Justicia, Rafael Catalá, aprobó en diciembre un real decreto por el que se concedió la nacionalidad española por carta de naturaleza al que fuera embajador de Israel en España Shlomo Ben Ami y a su esposa, Ruth Simhoni.
Ben Ami, de nacionalidad israelí, fue el segundo embajador del Estado de Israel en España, cargo que ejerció hasta 1991.
El Gobierno destacó que desde ese puesto contribuyó de manera determinante al fomento de las relaciones entre los dos países y recordó que participó en la Conferencia de Madrid de 1991 sobre el conflicto palestino-israelí con un cargo oficial por la parte israelí.
Margen de un mes antes de recurrir al Ciadi
Ante la resolución de liquidación del Gobierno colombiano, la compañía española tiene previsto recurrir a un arbitraje internacional ante el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias relativas a Inversiones (Ciadi). La reclamación partirá del agujero de 1.259 millones de euros de la filial cuando perdió el control.
Pero mientras prepara las acciones legales, Gas Natural trata de llegar antes a un acuerdo para que el Gobierno colombiano deje sin efecto la medida.
A pesar de la rápida respuesta pública de la empresa a la liquidación, el recurso al Ciadi no va a ser inminente. Fainé está dispuesto a darse un plazo de espera de un mes. Un margen temporal que se considera como un espacio para alcanzar esa solución pactada y poner de manifiesto la voluntad negociadora de la compañía.
