Malestar en la aerolínea

Vueling no quiere más comandantes que reciban a Puigdemont con la bandera de España

Instrucción interna a la tripulación semanas después de la fotografía de un piloto con el president en el vuelo a la Copa del Rey. Se produjo en plena polémica de las esteladas

Un comandante de vuelo recibe a Puigdemont con una bandera de España en la corbata. Quico Sallés.
Un comandante de vuelo recibe a Puigdemont con una bandera de España en la corbata. Quico Sallés.

La guerra política por las banderas, con la prohibición y posterior marcha atrás en torno al uso de esteladas en la final de Copa, también llegó al avión de Vueling en el que viajó el president de la Generalitat. El comandante del vuelo recibió a Puigdemont con una gran bandera española en la corbata. Y esa polémica ha obligado a la aerolínea a lanzar un recordatorio a la plantilla.

El equipo de Presidencia se tomó con humor la anécdota del oficial de vuelo que definieron como un “acto de autoafirmación”.

Pero el piloto se fotografió con el uniforme de la aerolínea y Vueling no está dispuesta a que sus pilotos y el resto del personal comprometan a la compañía en su conjunto con declaraciones o actuaciones individuales de este tipo.

Por ello, ha pedido “extrema prudencia” a la hora de difundir en los medios de comunicación y en las redes sociales comentarios relacionados con la empresa.

La petición ha sido canalizada a través de un correo electrónico interno, que fue enviado la semana pasada a toda la tripulación, lo que incluye a pilotos y azafatas. Se produce también ante la inminente campaña de verano, que coincide con una mayor atención por parte de la prensa y la incorporación de nuevos tripulantes.

Denuncias de los pilotos

De inmediato, la sección sindical de SEPLA denunció que la compañía había ordenado a sus pilotos, desde el Departamento de Comunicación, a abstenerse de hablar con la prensa y de colgar comentarios en las redes sociales.

“Decirnos cuándo, dónde y con quién podemos o no podemos hablar no sólo es una violación clara del derecho a la información y a la libre expresión, sino que también afecta a nuestro derecho a la libertad sindical, indispensable para hacer correctamente nuestro trabajo a la hora de representar a nuestros compañeros pilotos”, protestaron.

“No se pretende acallar a nadie”

Fuentes de Vueling consultadas por El Confidencial Digital matizan estas afirmaciones. Aseguran que “la aerolínea no pretende acallar nadie y mucho menos a un sindicato” porque tendría un efecto contraproducente.

Pero si admiten que han decidido lanzar un mensaje recordatorio a la plantilla, contemplado en el Código de Conducta, en relación a que hay que ser cuidadosos con los mensajes que se lanzan al exterior porque “cuando se habla, se hace en nombre de toda la compañía”.

Vueling destaca que posee su propio equipo de portavoces, y que deben ser ellos quienes atiendan, gestionen y actúen como intermediarios de las apariciones en los medios de comunicación. De hecho, recuerdan que conceden habitualmente entrevistas con pilotos y lo continuarán haciendo.

 

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