La prensa económica se “enciende” con los métodos de Moncloa: tercer ‘briefing’ reservado tras un consejo de ministros

El Ejecutivo ha tomado por costumbre convocar, después de los consejos de ministros en los que se abordan asuntos económicos relevantes, un “briefing” para periodistas. Estas sesiones se organizan en diferentes Ministerios y en ellas un miembro de segundo nivel del Ejecutivo matiza o incide en lo dicho por los ministros en la rueda de prensa oficial. Los periodistas de información económica consideran que en esos encuentros no se comenta nada relevante sobre los asuntos de la agenda del día y por tanto, creen que están siendo una pérdida de tiempo. Un ejemplo de esos “briefing” fue el protagonizado por el de Estado de Hacienda y Presupuestos, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, el pasado 20 de enero, después de que el Gobierno aprobase la reforma fiscal. MAFO recordó lo comentado horas antes en el consejo de ministros sin aportar nada nuevo. Del mismo modo, el pasado 3 de febrero, día en el que el Ejecutivo dio luz verde a la OPA de Gas Natural sobre Endesa, el secretario de Estado de Economía, David Vergara, congregó a los medios de comunicación en un aparte para hablar sobre las condiciones impuestas por el Gobierno a la gasista. La última de esas reuniones restringidas con la prensa tuvo lugar el pasado viernes, con motivo de la ampliación de competencias de la Comisión Nacional de la Energía (CNE), aprobada por el consejo de ministros para hacer frente a la “contraOPA” de E.On sobre Endesa . En esta ocasión, el encuentro con la prensa económica se celebró en el Ministerio de Industria y estuvo protagonizado por un miembro de la Oficina del asesor del presidente del Gobierno, Miguel Sebastián, y por un director general de Industria. La presencia de un miembro del equipo de Sebastián en ese “briefing” llamó la atención, puesto que siempre se ha dicho que el gabinete del asesor económico de Moncloa es una oficina de apoyo. Pero lo más grave del encuentro fue que, por tercera vez, allí no se aportó nada nuevo a lo dicho por los ministros en el consejo de horas antes. Tras la reunión, la prensa económica estaba “encendida”. Con este tercer encuentro pudo confirmarse lo poco productivo que resultan estos “briefing”, pues los periodistas llegan más tarde a sus redacciones y tienen menos tiempo para escribir sus informaciones. Hay quién se pregunta incluso si esa será la finalidad del Ejecutivo: entorpecer el trabajo de los informadores.