Seis soluciones baratas para sobrevivir a la ola de calor
La información meteorológica alerta estos días de una masa de aire muy cálido que atraviesa la Península, dejando temperaturas de más de 40 grados en gran parte de España. Son muchas las maneras de afrontar el sofocante calor pero algunas de ellas, como el aire acondicionado, implican rascarse el bolsillo. Conozca seis métodos baratos que le ayudarán a superar las altas temperaturas.
Subir el aire acondicionado, comprar un ventilador más potente o ducharse con agua fría varias veces al día son algunos de los consejos que los expertos en salud recomiendan para superar el sofocante calor. Pero todos ellos implican un mayor gasto económico del habitual.
El Confidencial Digital ha seleccionado seis formas, sencillas y baratas, de sobrevivir a las altas temperaturas que España padece estos días:
1. Cerrar las persianas durante el día y dejar las ventanas abiertas. En la franja horaria de mayor calor, de 12 a 18 horas, es importante reducir el impacto de la luz solar sobre las habitaciones de la casa. Por eso, mantener las persianas cerradas o semicerradas ayudará a mantener más fresca la habitación.
Si los rayos del sol inciden sobre la habitación directamente durante todo el día, se encontrará a última hora de la tarde a bastante temperatura. Si además la ventana está cerrada, y la luz solar atraviesa el cristal, se reflejará, lo cual aumentará todavía más la sensación de bochorno dentro de la habitación.
2. Crear corrientes de aire colocando correctamente el ventilador. Una de las maneras más simples de aumentar el efecto del ventilador es situarlo cerca de la ventana. Así, el aparato no sólo moverá la masa de aire de la habitación, sino también la que entra por la ventana.
También se pueden crear corrientes de aire manteniendo abiertas la ventana y la puerta, si se encuentran en posiciones opuestas de la habitación. Si se tienen dos ventiladores, situar uno al lado de la ventana y otro en la entrada, para aumentar todavía más la sensación de corriente.
3. Comer poco y varias veces. El proceso digestivo aumenta la temperatura corporal, por eso expertos nutricionistas recomiendan no realizar grandes ingestas de alimentos. Hacer más comidas al día, pero de cantidades menores, es la mejor forma de plantear la dieta durante una ola de calor.
4. Beber antes de tener sed. Una buena hidratación es fundamental durante todo el año, pero su importancia aumenta cuando suben las temperaturas. En el momento que se tiene sed, significa que nuestro cuerpo tiene un déficit de agua, lo cual es un problema. Por eso, hay que adelantarse, y beber incluso cuando no se tenga sed.
5. Evitar alcohol y cafeína. En vacaciones, al aumentar el tiempo libre, se suelen alargar las sobremesas de café. Además, se organizan más fiestas y reuniones en las cuales abundan las bebidas espirituosas.
Pues bien, tanto el alcohol como el café deben ingerirse lo menos posible, ya que ambas aumentan la deshidratación corporal.
6. Utilizar ropa holgada y de colores claros. Es lógico buscar prendas que no queden muy apretadas, ya que de lo contrario estaríamos aumentando la sensación de sofoco en el cuerpo.
El color y la temperatura están directamente relacionados. Cuanto más oscura sea la ropa que llevemos, más absorberá el calor, por eso se recomiendan prendas de colores claros en verano.
Para los días de calor, hay que buscar ropa hecha con tejidos naturales (como lino o algodón), ya que son los más frescos.
