Un beligerante Alejandro Echevarría tacha de fascista al Defensor del Pueblo y alaba a Cafarell por su trabajo en TVE

El Defensor del Pueblo, Enrique Múgica, no se fía de la autorregulación de la telebasura que dicen querer llevar a cabo las televisiones privadas. El presidente de Tele 5, por su parte, se defendió este martes tildando las amenazas de Múgica como propias de “la prensa del movimiento”. Además, calificó de loable el intento de Carmen Caffarel por devolver al Ente su función de servicio público.

Entre los asistentes al desayuno informativo organizado por el Forum Europa pudimos ver compartiendo mesa a dos directivos con intereses enfrentados por culpa de un laudo: Blas Herrero (Kiss FM) y Maurizio Carlotti (Antena 3 TV). También tomaron café juntos, en la mesa principal, Ana Pastor y Gabriel Elorriaga por un bando y José Blanco por el otro. Tanto el PSOE como el PP, quisieron arropar el discurso del presidente de Tele 5, si bien unos salieron bien parados y otros no tanto.

Echevarría elogió concretamente el esfuerzo que viene haciendo el equipo de Zapatero en la creación de un nuevo estatuto para los medios públicos, y de una nueva ley que reestructure el sector audiovisual. La nueva directora de TVE, dijo, ha devuelto un su carácter público a Prado del Rey. Por el contrario, calificó la etapa de los “populares” como improvisada e intervencionista en materia televisiva.

Pero no todo fueron alabanzas para el actual Gobierno. El presidente de Tele 5 dijo no esperar nada serio de un comité de “sabios” que no conocen el mundo de la televisión: “Si dejamos a estos expertos regular el mercado audiovisual español –explicó-, es mejor dedicarnos a otra cosa”, para añadir que es absurda la legislación que ampara la multa que su cadena ha recibido recientemente por contraprogramación.

Alejandro Echevarría aboga por una urgente redefinición del modelo de la televisión pública y ha calificado de vergonzosa la deuda de siete mil millones de euros que esta arrastra, máxime cuando no cumple un servicio público y disfruta de una doble financiación, enfrentándose de esta manera a las televisiones privadas en clara competencia desleal.

En esta línea también se quejó por la posible privatización de una de las dos cadenas públicas. Sí a una televisión pública fuerte, aunque –matiza- fuera de la lucha por el mercado de la publicidad.

Otros temas de los que también trató Echevarría fueron:

- Tele 5 y el IBEX 35. El presidente de la cadena privada desea que su empresa entre a formar parte del IBEX a finales de este año o a principios de 2005 a lo más tardar.

- Nuevas concesiones televisivas en analógico. Echevarría defiende que ya no hay sitio en el mercado audiovisual español para más cadenas emitiendo en analógico. Lo que debe hacer el Gobierno es aparcar este tema y esforzarse para que la emisión en digital se produzca lo antes posible. Respecto a una posible concesión de licencia a Canal + para emitir en abierto afirma que se ha publicado mucho, pero que no son más que rumores.

- La creación de un consejo audiovisual de alcance nacional. Apuesta por un consejo independiente que regule los contenidos de las televisiones, pero siempre que prescinda de cualquier función censora.

- La telebasura. Se ha hecho mucho discurso demagógico sobre este tema. Echevarría dice que no la puede definir porque no tiene definición alguna. Lo que para unos es telebasura para otros no lo es. En este tema hay que ser pragmáticos: proteger a los menores de contenidos inadecuados y esforzarse por hacer programas cada vez mejores.