El Economista afronta una ampliación de capital. Algunos accionistas, principalmente constructores, no acudirán al proceso

El diario fue fundado en 2006 con un capital inicial de 16 millones de euros por un grupo de socios agrupados en torno a Alfonso de Salas. Entre estos accionistas se encontraban Jacinto Rey, de Constructora San José, Carlos Cutillas, de Inmobiliaria Chamartín, Javier Sánchez Ramade, Vicente Boluda, Luis Canales, fundador de Alcosto, Tomás Fuertes, El Pozo, e Ignacio Pérez, Menaje del Hogar.

Ninguno de ellos posee una participación superior al 7,5%. Además, el accionista de referencia, ‘Il Sole 24 Ore’, algunos trabajadores pudieron sindicar títulos accionariales.

Fuentes solventes consultadas por El Confidencial Digital aseguran que varios de estos primeros socios han manifestado su negativa a acudir a este proceso de ampliación de capital de El Economista. Se trata, principalmente, de constructores, que reconocen estar sumidos en una situación delicada en sus negocios y no poder ampliar su inversión en la cabecera económica.

La empresa reconoce que, en la ronda de contactos que ha iniciado, algunos socios ya han mostrado su interés en ampliar su participación en el diario y otros, por su parte, han reconocido que se pensarán si acudirán a este proceso de ampliación de capital.

Fuentes directivas de El Economista reconocen que en el caso de que algún accionista decida retirar su participación, en la fundación del periódico ya se tuvieron que descartar a algunos posibles socios que querían participar en el proyecto. Será entonces cuando se contacte con ellos.

El diario cumple las expectativas

Las fuentes de la dirección consultadas por ECD aseguran que El Economista está cumpliendo con los objetivos que se han marcado y que los responsables del periódico se encuentran contentos por la marcha del mismo. Aluden a que la difusión es la esperada (23.000 ejemplares en enero) y que en Internet los datos son “medianamente buenos”: 3.289.000 usuarios únicos, una cifra considerada “record”.

El Economista acaba de incorporar, además, a Nouriel Roubini, el profesor de la Universidad de Nueva York de quien se dice que predijo la actual crisis. Escribirá un artículo semanal. Y no es el único fichaje: el director, Amador G. Ayora, prepara más incorporaciones en su apuesta por la opinión y el análisis.