Albañiles y pintores, escayolistas, ya no quieren enseñar el oficio a emigrantes
La presencia de mano de obra inmigrante en la construcción es especialmente intensa, y por tanto en los distintos oficios que tiene el sector. Se han integrado en grandes empresas, pero también en firmas subcontratadas cuyos propietarios son pequeños empresarios y hasta autónomos. Desde hace algún tiempo, albañiles, pintores, escayolistas o fontaneros españoles yo no enseñan el oficio a inmigrantes, porque han comprobado que muchos de ellos, en cuanto lo aprenden, se instalan por su cuenta, convirtiéndose en competidores muy duros, también por los precios que ponen.