Psicosis en el Ayuntamiento de Madrid: ahora nadie se atreve a destruir papeles
La llegada de Manuela Carmena al Ayuntamiento de Madrid, junto con el revuelo por la trituración de papeles denunciada en algunos distritos y áreas, ha provocado cierta psicosis entre funcionarios municipales, sobre todo entre los van a tener que abandonar su puesto en los próximos días.
Cuentan algunos funcionarios que el volumen de documentos acumulados en la alcaldía madrileña tras 24 años consecutivos de gobierno del PP, resultado de todas las gestiones realizadas a lo largo de tantas legislaturas, es enorme.
Por ello, desde hace semanas, cientos de funcionarios se afanan en deshacerse de aquello que consideran que nadie va a utilizar, y que ocupa el espacio necesario para esta nueva etapa del ayuntamiento. Sobre todo, mucho papel.
Sin embargo, algo ha cambiado hace unos días. Según le explican a El Chivato, algunos empleados municipales se niegan ahora a destruir papeles acumulados en sus despachos y departamentos, por miedo a ser acusados por los medios de comunicación y determinados sectores de eliminar “supuestas pruebas”.
Tal y como explican ellos mismos, la publicación, en los días posteriores a las elecciones municipales, de imágenes en las que aparecían montones de bolsas de basura llenas de documentos triturados a las puertas de las sedes municipales, levantó la voz de alarma: “Muchos pensaban que estábamos eliminando papeles ilegales”, comentan.
Lo que temen es que procedan a triturar documentos inservibles y “se piense que estamos haciendo algo ilegal”.
