A Cándida Villar, que pasa de ser una asistenta de ‘las de toda la vida’ a una estrella del cine, modesta y humana
Es la asistenta más famosa de la radio española, gracias a su “jefe”, Guillermo Fesser que desde muy niño la tiene en casa como una más de la familia. Se convirtió en las ondas en crítica de cine, peculiar donde las haya, pero siempre sincera y con un sentido del humor que engancha. Ahora pasa a la gran pantalla, a protagonizar la película de su propio pasado. 75 años de una vida dura, marcados por lo malos tratos de su marido, el sacar adelante a sus ocho hijos, algunos vinculados con las drogas, la cárcel y el alcohol. Pero ella siempre ha estado ahí, poniéndole buena cara a los revés que te da la vida y dejando para los demás un sentido del humor limpio, sano, llano, sin grandes aspiraciones. No abandona su modestia al presentar la película y por ello se lleva la guinda para que la disfrute durante muchos años.
