Al grupo de niños barceloneses, que envían una carta a su concejal y consiguen que el Ayuntamiento convierta una calle en peatonal

Un grupo de nueve niños entre cuatro y catorce años decidió escribir a su concejal de distrito del barcelonés barrio de Sans. Los chavales querían que la calle Finlandia se convirtiera en peatonal y no pasaran coches por allí para así poder jugar ellos. Cogieron papel y bolígrafo y enviaron una carta al ayuntamiento. Tras recibirla, el concejal decidió que todos los domingos la Policía vallase la vía para que estos niños pudieran jugar en la calle. Un político cediendo a una petición de un grupo de niños. Parece que los cargos públicos hacen más caso a sus demandas. Podrían los escolares redactar cartas y enviarlas a La Moncloa mostrando su opinión acerca de cómo se debe luchar contra el terrorismo. O remitir misivas a Génova para aconsejar a Rajoy sobre cómo se deben tratar a los inmigrantes, por sólo poner dos ejemplos. A lo mejor así nuestros políticos escuchan nuestras quejas y nuestras peticiones. Guinda a este grupo de niños.