Al ministro Alonso, que paga la desconcertante política ZP con Afganistán: no irán tropas de refuerzo pero no logran un agregado para la Embajada española
Otro varapalo más para la política militar de nuestro Ejecutivo. Y da la casualidad, o no, de que se produce en un país como Afganistán, donde el papel de nuestras tropas allí está puesto en entredicho por muchos sectores de la sociedad española. ¿Son una ONG en misión humanitaria o un Ejército de pacificación? Los mandos demandan refuerzos para asegurar al contingente español deplegado. Zapatero mira –como suele- a las urnas y al desgaste que eso supondría. Y se niega. Ahora, se ha sabido -gracias a una información desvelada ayer por Europa Press- que el Ministerio de Defensa ha declarado “desierta” la plaza del agregado de Defensa, Militar y Aéreo de la nueva Embajada de España en Afganistán, más de dos meses después de su convocatoria (en enero) y a la que se podían presentar militares con el empleo de coronel o capitán de Navío. No hay que olvidar que en Afganistán hay en este momento 690 militares españoles desplegados que necesitan “un mejor y más eficaz apoyo” –este es el objetivo con el que era creado este puesto de agregado-. La seguridad de nuestras tropas allí ya ha sido amenazada con algunos videos reivindicados por Al Qaeda. Guindilla a un ministro que le ha tocado jugar un ‘papelón’ por seguir fielmente los dictados de la superioridad.
