A un matrimonio de Granada que provoca, con su negligencia, que su bebé de 11 meses ingiera hachís y resulte intoxicado
El caso clama al cielo. ¿En qué estarían pensando esos padres cuando llevaron al hospital a su bebé de 11 meses? ¿Cómo han podido tener tanta dejadez en sus funciones de progenitores para llevar al extremo de que esa criatura llegue al centro sanitario intoxicada por haber consumido hachís? Las instituciones sociales están tras el caso, vigilando de cerca de esa familia que tiene, además de a la pequeña de 11 meses, a otros cuatro hijos. Los padres ni siquiera se han presentado a las citas judiciales que se han planteado. La única explicación que dieron al suceso es que el bebé pudo ingerir la droga mientras jugaba en el rellano de la escalera con sus otros hermanos. Inaudito. El Ayuntamiento de Granada ya puede ponerse manos a la obra para conseguir que este hecho se quede en eso, una noticia. Ser padre es difícil pero algunos “patinan” en aspectos clamorosos. Aún así, la guindilla para estos padres, que han de ejercer de tales las 24 horas al día, por muy difícil que resulte.
