ZP, ¿una losa para España y los derechos humanos?
¿Cuánto nos cuesta a los contribuyentes y a los defensores de los derechos humanos y de la democracia cada "elogio" recibido por ZP? ¿Cuánto retroceden los derechos humanos y las libertades cada vez que a ZP lo "elogian" los dictadores como Castro?
¿Cuál es el costo para la unidad de España cada que vez ZP entrega algo a los secesionistas vascos y catalanes? ¿Acaso nos beneficiamos algo los contribuyentes y defensores de los derechos humanos?
Casi todos ya elogian a ZP por una cosa u otra. El último elogio ha sido este que leo en la prensa del 27 de octubre: "Gran Bretaña elogia a ZP por aparcar la reivindicación de la soberanía de Gibraltar". Ya lo "elogió" Berlusconi por renunciar a que la firma de Constitución de la Unión Europea se realizase en Madrid.
Lo "elogió" Chirac por renunciar a la cuota de poder de país de primera división que España había alcanzado con el Tratado de Niza. Lo ha elogiado el dictador Fidel Castro con sus cien mil presos políticos en Cuba. Lo han elogiado por abandonar al Polisario.
Lo elogian los de Carod-Rovira por los pactos poco transparentes en los Presupuestos Generales del Estado que originan la gestión de los dineros de los contribuyentes, no de ZP. Lo "elogian" los separatistas vascos porque ya no será delito convocar un referéndum de independencia.
¡Qué ZP más elogiado! Este ZP es elogiado a costa de que España renuncia a sus avances a cambio de poco o nada para los ciudadanos españoles que pagamos impuestos.
Ni se ayuda a las madres con hijos, las listas de espera siguen ahí, los fracasos escolares y falta de libertad educativas para los menos pudientes están a la orden del día. También a más del ochenta por ciento de los padres que ejercen sus derechos educativos a clases de Religión se les acosa.
ZP gana "popularidad" a costa de sacrificar los intereses generales de los contribuyentes, de los defensores de los intereses de España en Europa, de los débiles como el Polisario, y de gentes pacíficas como esos padres que desean ejercer su libertad educativa.
También gana "popularidad" a costa de enfrentarse contra los defensores de los derechos humanos desde a la vida, a la democracia al apoyar el aborto y la dictadura cubana.
¿Acaso ya tantos "elogios" no parecen sospechosos? ¿Acaso no parece que le importa más caer "simpático" que defender la prosperidad y los derechos humanos del mundo? ¿Es ZP un “vendepatrias” por regiones?
