Franco sigue siendo un “general valeroso” y Negrín un “dictador”. El Diccionario Biográfico Español no ha modificado sus perfiles polémicos: verá la luz en diciembre
Franco fue un "general valeroso". Zapatero ganó las elecciones de 2004 aprovechándose del "hundimiento del Prestige". O Juan Negrín fue un "dictador". Así se lee en tres de las biografías que aparecen en el Diccionario Biográfico Español, la monumental obra que está ultimando la Real Academia de la Historia, que en su día provocó una gran polémica, pero que se verá concluida con el PP en el Gobierno. Ninguna de las biografías ha sido modificada.
El Diccionario recoge un total de 40.000 biografías, desde personajes del siglo III antes de Cristo hasta los más recientes, incluyendo el perfil de la ex ministra Bibiana Aído.
Una de las reseñas que en su día provocó un gran debate es la de Francisco Franco (el historiador Luis Suárez define a Francisco Franco como “un gobernante católico, inteligente y moderado”), pero también lo suscitaron las de Santiago Carrillo, La Pasionaria o Juan Negrín.
Una comisión
La primera parte de la obra fue presentada por don Juan Carlos el pasado mes de mayo, junto a la entonces ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde. El coste total: 6,4 millones de euros. Su aparición provocó entonces una intensa polémica, se publicaron críticas de historiadores a algunas de las voces, todo lo cual llevó a la Academia a tomar la decisión de crear una comisión ‘ad hoc’ para revisar las biografías más polémicas.
La comisión, promovida por la propio Academia, está compuesta por Faustino Menéndez Pidal, Carmen Iglesias, Carmen Sanz Ayán y Vicente Pérez Moreda, como académicos, además de dos expertos independientes: Juan Pablo Fusi y José Varela Ortega. Todos ellos han debido leer cada una de las biografías del Diccionario Biográfico, no pudiendo delegar esta función, y su dictamen no es vinculante.
Fuentes de la Academia de la Historia, consultadas por El Confidencial Digital, explican que las biografías que ya están escritas no se modificarán, a pesar de la polémica, y aparecerán publicadas tal como las redactaron los historiadores encargados.
Un anexo final
De hecho, los primeros 25 volúmenes (en total se editarán 50) que se presentaron en mayo, en los que se ‘detectaron’ esas biografías polémicas, ya se están imprimiendo y vendiendo.
De cara al futuro, la Academia no descarta recoger las conclusiones de la comisión, aunque todavía no ha decidido cómo hacerlo. Una de las opciones es publicar una separata final con esos textos, en un anexo a la edición impresa, y recoger las resoluciones de manera completa en la versión digital.
Está previsto que los últimos 25 volúmenes del Diccionario se publiquen a lo largo de este año 2012, antes del mes de diciembre.
A raíz de la polémica por el contenido de algunas biografías como las ya citadas varios periodistas de El País y Público pasaron largas horas de trabajo en la biblioteca de la Real Academia de la Historia revisando una por una todas las voces, pero finalmente dejaron de ir y el asunto quedó olvidado por dichos medios.
Vea a continuación una imagen de la publicidad que hizo la Real Academia de la Historia para vender los primeros 25 volúmenes del Diccionario, y que cuando saltó la polémica quedó bloqueada. Ahora se vuelve a difundir:
