Zapatero se va a dedicar a ‘lavar’ su mala imagen como presidente dando conferencias. Tiene muchas peticiones y hablará sobre todo de socialdemocracia y de feminismo

Zapatero considera que la coyuntura económica se llevó por delante el discurso que defendió entre 2000 y 2008. Aquel “os aseguro que el poder no me va a cambiar” que pronunció en las puertas de Ferraz quedó en nada por la crisis. Según su punto de vista, la grave situación económica fue la causa de que tuviera que tomar decisiones que iban contra su modo de pensar.

Según ha podido saber El Confidencial Digital, José Luis Rodríguez Zapatero se ha propuesto ahora ‘lavar’ su imagen. Quiere que los españoles le recuerden como un gobernante moderno y progresista, y no como el presidente que rebajó el sueldo a los funcionarios, elevó la edad de jubilación y congeló las pensiones.

El ex presidente comenta que tuvo que tomar todas las medidas de ajuste “para que España no fuera intervenida”.

Socialdemocracia y feminismo

El programa de futuro de Zapatero incluye sobre todo impartir conferencias por el mundo para explicar esa realidad. Los principales puntos de su discurso serán:

-- Socialdemocracia moderna: es decir, alejarse de lo que, él mismo considera, tuvo que hacer por obligación con motivo de la crisis financiera.

-- Feminismo. Zapatero se declara un firme defensor de las mujeres. Presume en privado de ser el único gobernante español que amplió, con creces, sus derechos.

-- Keynesianismo. El ex presidente considera que, para salir de la crisis, la mejor receta es aplicar las recetas del economista británico.

Le llueven las ofertas

La intención de Zapatero, tal y como ha comentado a su entorno de confianza, es impartir cuantas conferencias le ofrezcan en su calidad de ex presidente del Gobierno de España. Acudirá a todas las que le sea posible.

Ha asegurado a sus íntimos que le están ‘lloviendo’ las ofertas para pronunciar discursos.

De hecho, ha llegado a comentar a sus más cercanos que no quiere hacer nada más: dar conferencias y acudir a las reuniones del consejo de Estado, donde tiene ya un despacho, y al que tiene que asistir semanalmente para asistir a las sesiones plenarias.

No criticará a Rajoy

Uno de los asuntos que más ha molestado a Zapatero son las durísimas críticas, a los ocho años de su gestión como presidente, que ha lanzado José María Aznar, su predecesor en La Moncloa.

Considera que el presidente de honor del PP se ha dedicado a ‘dar estopa’ a su Gobierno.

Rodríguez Zapatero dice que no caerá en el error de hacer con Rajoy lo mismo que Aznar practicó con él. Se ha propuesto pronunciar “discursos de Estado”, pero dando su apoyo al Gobierno de Mariano Rajoy en esta complicada travesía que aún le queda por delante. No se comprometerá con sus políticas, pero dice que tampoco le torpedeará.

León

Entre los planes de Zapatero se encuentra también escaparse durante los fines de semana que pueda a su añorado León.

De hecho, ya ha acudido algún sábado a pescar en un coto cercano a la ciudad. El ex presidente del Gobierno tuvo la oportunidad de estrenar la caña de pescar que le regalaron quienes fueron sus ministros en una cena privada que celebraron hace algunas semanas.