El ministro Alonso da marcha atrás y decide no llevar periodistas a Estados Unidos tras los incidentes en el Líbano

Los informadores especializados en cuestiones de Defensa iban a viajar con el ministro a Washington, del 22 al 26 de octubre, con motivo de la visita oficial de Alonso a aquél país, durante la cual está previsto que se reúna con su colega norteamericano, Donald Rumsfeld. Ese desplazamiento en el avión oficial del ministro ha quedado anulado.   El citado viaje había sido anunciado a los periodistas hace dos semanas, para que hicieran llegar su documentación al gabinete y diera tiempo a tramitar las acreditaciones. Se trata, por tanto, de una decisión tomada en las últimas horas. El gabinete de prensa ministerial no ha ofrecido ninguna explicación sobre la citada cancelación.   Se da la circunstancia de que a su llegada al cargo, José Antonio Alonso aseguró -en sus primeros encuentros con los medios- que consideraba una prioridad visitar al secretario de Estado de Defensa norteamericano, Donald Rumsfeld, y que, cuando llegara el momento, prometía llevar a los periodistas.   La supresión del viaje se produce al día siguiente de que El Confidencial Digital publicara que, durante la visita del titular de Defensa a las tropas españolas en el Líbano, los periodistas sufrieron constantes dificultades para realizar su labor, incluidos choques con los responsables de prensa del Ministerio, lo que culminó en el gesto de no levantarse para hablar con el ministro durante el vuelo de regreso a España. Vea aquí la noticia.   Más problemas en Líbano   Por cierto que los inconvenientes que sufrieron los enviados espaciales en el Líbano no se reducen a lo ya relatado por ECD ayer. Hay más datos.   Por ejemplo, durante la rueda de prensa que ofrecieron los dos ministros, no hubo traducción de lo que decía el libanés, salvo para Alonso, al que se le traducía al oído. De tal forma que los periodistas españoles tuvieron después que fiarse de la versión que les dio la representante de la agencia libanesa de noticias.   Como ya se dijo, en el contacto del grupo español con el ministro, el Jefe del Estado Mayor de la Defensa y el coronel al mando, no se permitió dirigir preguntas más que a José Antonio Alonso, quien, por cierto, en ocasiones antes de responder tuvo que consultar en voz baja a los militares.   La rueda de prensa con el ministro libanés se desarrolló en un microjardín, en el que apenas cabían los informadores. Tan es así, que más de uno acabó metiendo los pies en uno de los estanques, incluido el jefe de protocolo del ministerio de Defensa, además de algún periodista.