Antifraude de Cataluña demanda a Manos Limpias por acusarle de no investigar a Jordi Pujol
Miguel Bernard, presidente del sindicato, aseguró en agosto que el organismo catalán actuaba siguiendo instrucciones políticas
La Oficina Antifraude catalana acaba de iniciar una ofensiva legal contra el presidente de Manos Limpias, Miguel Bernard. Este sindicato es el responsable de recientes demandas contra Artur Mas y Jordi Pujol. Se dio a conocer como el azote de Iñaki Urdangarín en el caso Noos, donde actúa como acusación popular.
En efecto, el pasado viernes 26 de septiembre este organismo presentó en un juzgado de Barcelona una demanda contra Manos Limpias por acusarles de guardar en un cajón denuncias contra Jordi Pujol siguiendo órdenes de la Generalitat de Catalunya.
“Sólo puedo confirmar que la demanda está puesta. Anunciamos en agosto una querella y hemos cumplido. No vamos a decir nada más al respecto”, aseguran fuentes de la Oficina Antifraude catalana.
Según ha podido saber este confidencial, tres días antes, el martes 23 de septiembre, Miguel Bernard estaba citado en un juzgado de Barcelona para el acto de conciliación previo. Se le pedía que se retractara públicamente de sus acusaciones si quería evitar la denuncia.
El presidente de Manos Limpias no acudió a la cita aunque sí hizo llegar un mensaje a la otra parte ofreciendo firmar la paz para evitar una batalla que ahora inicia. “No se nos ha notificado oficialmente nada todavía, pero responderemos”, han señalado fuentes del sindicato.
Fuentes de Manos Limpias aseguran que disponen de “al menos dos casos” de personas que presentaron escritos contra Jordi Pujol y “les dijeron que no podían hacer nada”.
Declaraciones de Bernard
Toda la polémica inicia a mediados de agosto, cuando Miguel Bernard presenta una querella contra Jordi Pujol y su mujer, Marta Ferrusola, acusándoles de siete delitos. Ese día, Bernard asegura públicamente que está estudiando poner una demanda también contra la Oficina Antifraude de Cataluña por “mirar hacia otro lado” y no haber investigado varias denuncias de empresarios catalanes contra Jordi Pujol.
Según relató Bernard, tenía pruebas de que algunas denuncias presentadas ante este organismo habían sido desestimadas. Bernard aseguró también estar convencido de que “en un porcentaje altísimo” de ocasiones este organismo se movía sólo por “consideraciones políticas” y no “consideraciones legales”.
Daniel de Alfonso, presidente de la Oficina Antifraude, negó inmediatamente esas acusaciones. En primer lugar, aseguró que “siempre” se investigaban todas las denuncias que llegaban a la Agencia. Pocos días después, hizo público dos extensos informes en los que se daba cuenta de la investigación realizada por este organismo sobre los negocios de la familia Pujol.
El primero estaba fechado el 14 de marzo de 2013. El segundo, el 4 de abril de ese mismo año. Fueron entregados a la teniente fiscal de Anticorrupción, Belén Suárez, y se elevaron también a la Agencia Tributaria.
Una denuncia de Victoria Álvarez
De Alfonso explicó que sólo habían recibido una denuncia contra Pujol, concretamente de la ex novia de Jordi Pujol Ferrusola, María Victoria Álvarez, Vicky. El presidente de la Agencia aseguró que los datos aportados “eran inconexos” y que aún así, fueron investigados.
Además, aseguró, se pusieron en contacto con el juez Pablo Ruz para diseñar la estrategia procesal a seguir.
Estas palabras también provocaron las críticas inmediatas de la propia Victoria Álvarez y de Miguel Bernard.
