El PSOE tiene un problema con el ‘alcalde rojo’ de Marinaleda. Ha logrado ya en tres ocasiones provocar la rebelión de diputados de IU contra Griñán
El Gobierno PSOE-IU en Andalucía está atravesando los momentos más críticos desde su formación tras las elecciones del 25 de marzo. El alcalde de Marinaleda, que mostró desde el principio su oposición a ese pacto, ha logrado ya que diputados de Izquierda Unida voten en contra de las medidas de Griñán. Si logra convencer a un parlamentario más, la coalición perdería la mayoría en la Cámara con respecto al PP.
“muy preocupados” por los movimientos que en el último mes ha protagonizado Juan Manuel Sánchez Gordillo, diputado de IU por Sevilla y alcalde de Marinaleda.
Fuentes bien situadas en el PSOE andaluz, a las que ha tenido acceso este diario, explican que el propio Valderas ha reconocido al presidente de la Junta que “nos preocupamos en formar a la militancia para gobernar con el PSOE, pero no a nuestros diputados para garantizar la aprobación de las reformas”.
La inquietud de ambos dirigentes tiene que ver con las rebeliones que está impulsando el propio Gordillo dentro del grupo de IU en el Parlamento andaluz desde que se conoció el plan de recortes de la Junta, y que ya ha sido aprobado por la cámara autonómica con el voto negativo de diputados de Izquierda Unida.
Movilizaciones contra Griñán antes, durante y después de aprobarse los ajustes
Las fuentes consultadas por ECD explican que, una vez que se filtraron los detalles del plan de ajuste que preparaba José Antonio Griñán, “Gordillo montó en cólera y convocó reuniones paralelas del grupo parlamentario, intentando convencer a los diputados de votar en contra de la medida”.
El discurso del alcalde de Marinaleda “caló en más diputados de lo que ha trascendido”, pero una carta de Diego Valderas “consiguió templar en la medida de lo posible los ánimos”.
No obstante, el pasado día 27 de junio, tres diputados no apoyaron la ley presentada por Griñán: dos de ellos –el propio Gordillo y Marina Segura- votaron en contra y el tercero no se presentó al pleno.
Este hecho “es más que preocupante”, ya que “si Gordillo consigue convencer a un diputado más para su causa, la coalición PSOE-IU perderá la actual mayoría en la Cámara y se pondría en peligro la gobernalidad de la Junta”.
Después de esa votación, el frente de IU contrario al pacto con el PSOE, y que lidera el alcalde de Marinaleda, volvió a reaparecer el pasado 2 de julio, en una reunión en Sevilla en la que se acabó pidiendo la dimisión de Diego Valderas.
