Presidencia reúne a los directores de comunicación de los ministerios para unificar el mensaje sobre Cataluña
Recibieron la consigna de expresarse con la máxima prudencia y bajo el principio de “acción-reacción”
El desafío independentista en Cataluña, fortalecido con la investidura in extremis de Carles Puigdemont, tiene en máxima alerta al Gobierno. En Moncloa, no obstante, se apuesta por mantener la prudencia y no realizar acciones o declaraciones precipitadas. Por ese motivo, Presidencia pidió a los directores de comunicación de los ministerios unidad en el mensaje.
Según ha sabido El Confidencial Digital, la secretaria de Estado de Comunicación, Carmen Martínez de Castro, convocó el pasado lunes, por la mañana, a directores y responsables de comunicación de los ministerios que componen el Gobierno para abordar, entre otras cuestiones, la situación en Cataluña.
La reunión, explican las fuentes consultadas, estaba ya prevista antes de que el domingo fuera investido Carles Puigdemont, ya que los lunes Presidencia lleva a cabo ese tipo de encuentros con los dircom del Ejecutivo. No obstante, la actualidad política y el proyecto rupturista catalán coparon gran parte del cónclave.
Consigna: máxima prudencia
Martínez de Castro transmitió a todos los representantes de los ministerios que, en estos primeros días del nuevo gobierno catalán, el Ejecutivo central y todos sus portavoces debían mantener la máxima prudencia posible.
En ese sentido, la secretaria de Estado de Comunicación recordó a los allí presentes que, hasta el momento, el nuevo president “solo ha hecho una declaración de intereses”, sin llevar a cabo ninguna medida que conduzca a la independencia de Cataluña.
Así las cosas, el Gobierno debe “mantener la calma” y “esperar movimientos desde Barcelona”. Es decir, no tomar ninguna decisión ni realizar ninguna declaración “precipitada” antes de que haya novedades por parte de la Generalitat.
Los directores de comunicación consultados por ECD explican que la tesis de Presidencia es la siguiente: “Nos tenemos que regir por el principio de acción-reacción. No haremos ni diremos nada hasta que Puigdemont no mueva ficha”.
Las mismas fuentes, eso sí, se muestran contundentes frente al nuevo desafío soberanista: “Los nuevos representantes de la Generalitat deben saber que cada centímetro cuadrado de este país corresponde a todos, y su futuro no pueden decidirlo unos pocos”.
