Rajoy se pone serio y garantiza a Rivera que no recibirá votos de los independentistas
Le pedirá un “sí” en la investidura para presionar al PSOE y le volverá a ofrecer entrar en el Gobierno.
Mariano Rajoy se ha marcado un objetivo claro: convertir la abstención de Ciudadanos en un voto favorable a su investidura. Un objetivo, sin embargo, que parece ahora más difícil tras el apoyo de Convergència al PP para la constitución de la Mesa del Congreso. El presidente en funciones, no obstante, asegurará a Rivera que no cuenta con los convergentes para la investidura.
Según explican a El Confidencial Digital personas muy próximas a Rajoy, el presidente del Gobierno tiene decidido no realizar una nueva ronda de consultas con los diferentes partidos políticos tras ser recibido por Felipe VI el próximo jueves.
Su intención, tal y como se adelantó en estas páginas, es aceptar el encargo de intentar formar Gobierno ya con el apoyo de Ciudadanos garantizado. Y, si para dentro de seis días no los tiene, iniciar un “periodo de reflexión” para intentar convencer a otros partidos, pero con una prioridad clara: cambiar la abstención anunciada por Albert Rivera por un “sí” a su investidura.
No hay acuerdo con Convergència
Para ello, impulsará una serie de conversaciones bilaterales, y discretas, entre los equipos negociadores de PP y Ciudadanos y también entre él mismo y Rivera. En la última semana han hablado en varias ocasiones y el objetivo es mantener, e incluso ampliar, esa interlocución para cerrar cuanto antes un acuerdo.
No obstante, la abstención de Convergència en la votación de Ana Pastor como presidenta del Congreso, y el posterior visto bueno del PP a que los nacionalistas catalanes formen grupo propio, han indignado a Ciudadanos, que ha amagado con votar en contra de la investidura de Rajoy si se mantiene esa alianza.
Así las cosas, la prioridad de Rajoy es garantizar a Albert Rivera que el PP no buscará ni contará, en ningún caso, con el apoyo ni por activa no por pasiva de los convergentes. Otra cosa, matizan desde Moncloa, son los votos del PNV: los nacionalistas vascos no se han convertido en independentistas ni han desafiado al Estado y, además, su abstención, al menos a día de hoy, es imprescindible para la investidura.
Un “sí” para presionar al PSOE
En ese sentido, explican las fuentes consultadas, Rajoy recordará que el partido necesita la abstención del PSOE, y que el propio Sánchez ya dejó caer que ésta no se produciría salvo que el PP contara con el voto favorable de Ciudadanos.
Así las cosas, el jefe del Ejecutivo dejará claro ante Albert Rivera que, si su partido cambia la abstención por el “sí”, los 169 votos a favor supondrán una gran presión para el PSOE, que se verá obligado a cambiar su postura inicial.
Oferta de entrada en el Gobierno
Rajoy, no obstante, es consciente de que Rivera no se lo va a poner fácil. Juan Carlos Girauta, de hecho, manifestó ayer que C´s solo votaría “sí” en la investidura si el actual presidente en funciones se retiraba y el PP presentaba un candidato alternativa.
En Moncloa, sin embargo, no se da demasiada a importancia a esas declaraciones, ya que “ya se han realizado otras similares y no han llegado a nada”. Además, se confía en poder hacer cambiar de opinión a Ciudadano con la oferta de entrar en el Gobierno.
El propio Rajoy, de hecho, tiene intención de volver a planteárselo a Rivera en las conversaciones que mantengan en los próximos días. Además, según aseguran las fuentes consultadas, “hay un silencio sepulcral sobre los nombramientos de ministros porque no se descarta en absoluto la coalición”.
