La complicidad de la prensa y los periodistas será clave para que el alto fuego permanente y el final de ETA lleguen a buen término

Ésa es la valoración que realizaba un ex alto cargo del Ministerio del Interior, que estuvo en ese departamento durante las conversaciones de Argel, en el año 1989, y que por tanto conoce la dinámica de los procesos de ese estilo.   En su opinión, la actitud de la prensa a la hora de valorar los contactos, de comentar las posibles contrapartidas que se tengan que dar a cambio, y también con las informaciones que suministren o no, inciden decisivamente en estos procesos, que pueden resentirse si hay una “presión” informativa grave.   El citado alto cargo de Interior reconocía que, en las negociaciones con ETA de Argel, hubo un momento en que las dos partes ya sabían que todo había fracasado, pero alargaron el proceso y tardaron lo suyo en que se supiera, porque ambas delegaciones luchaban por que fueran los otros lo que aparecieran como responsables del fracaso.