El PSOE llamó por teléfono a la Conferencia Episcopal mostrando su inquietud por el apoyo a la objeción de conciencia en la Educación para la Ciudadanía
La jornada organizada por la Conferencia Episcopal Española sobre la asignatura de la Educación para la Ciudadanía ha traído mucha cola. Nervios en el PSOE e informaciones críticas con el acto: empeñadas en soslayar la cita o insistiendo en el número de sotanas presentes, cuando fueron una minoría. Hubo hasta una curiosa llamada telefónica.
Televisión Española aseguró que era una reunión de curas. Para El País, no hubo jornada pues no se publicó ni una línea al respecto. Sin embargo, el diario del Grupo PRISA sí publicó un duro artículo de opinión firmado por Gregorio Peces Barba, destacado promotor de plataformas a favor del laicismo. El análisis que se realiza en privado entre los organizadores de la jornada que tuvo lugar hace una semana es que hay muchos nervios en el PSOE y su entorno.
Hay una cierta desilusión por el número de asistentes al evento del pasado viernes día 17, que fue anunciado con antelación en exclusiva por ECD. Los promotores hablan de más de un centenar de personas: una cifra discreta. Se cursaron más de 400 invitaciones para cubrir las 200 plazas del recinto. En la sesión inaugural hubo 150 personas y a lo largo del día, en torno a 100.
Clérigos no hubo más de veinte, contando a 7 obispos y a Monseñor Martínez Camino. Los políticos se escondieron –reconocen las fuentes consultadas-, aunque mandaron infiltrados y estuvieron muy bien informados en todo momento. Se disculparon amablemente, por motivos de agenda.
Según ha sabido El Confidencial Digital, hubo hasta una llamada del PSOE a media tarde, mostrando su inquietud por el posicionamiento favorable a la objeción de conciencia que se estaba gestando, cuando todavía no había sido difundida la noticia a través de las agencias de noticias.
Acudieron empresarios y gente del mundo de la judicatura, pero –según testigos presenciales- “pocos y de escasa relevancia”. Hubo muchos profesores de secundaria, no sólo de Religión, venidos de toda España y muchos profesores universitarios, de centros públicos y privados, católicos y no católicos.
El balance final que realizaron los organizadores es que se trató de una cita raquítica en cuanto a los asistentes, pero de gran relevancia y utilidad: se ofrecieron razones sobradas sobre la cuestión y un argumentario que se podrá seguir a partir de ahora.
