La Policía ‘blinda’ el centro de Barcelona para la manifestación de la huelga general. Objetivo: evitar que grupos radicales se infiltren en la marcha y ‘monten’ una batalla campal como en marzo

Según ha sabido El Confidencial Digital, el Ayuntamiento de Barcelona y la delegación del Gobierno en Cataluña han dado orden de ‘blindar’ las calles del centro de la capital Condal desde primera hora de esta tarde.

El objetivo es que grupos violentos, vinculados a organizaciones como CGT y CNT, no consigan ‘infiltrarse’ en la marcha y puedan alterar el orden público aprovechando la manifestación que recorrerá hoy las calles más importantes de la ciudad. Una situación que ya se produjo en la última huelga general del 29 de marzo, y que ahora se pretende evitar a toda costa.

Están convocadas dos manifestaciones durante la tarde del 14-N a muy poca distancia. La primera de ellas es la de los sindicatos mayoritarios, CCOO y UGT, que cita a las seis de la tarde en plaza Catalunya. Media hora más tarde, otra marcha, en la que participarán otros sindicatos como la CGT, CNT o COS, entre otros, partirá de Jardinets de Gràcia para dirigirse, también, hacia plaza Catalunya, bajo el lema "Paremos la Europa del capital. No debemos, no pagamos".

Identificar a los violentos y retirada de contenedores

Según las fuentes consultadas, se ha trasladado a los agentes que participaran en el dispositivo de seguridad la consigna concreta de neutralizar a estos violentos, proceder a su inmediata identificación y ser detenidos antes de que la radicalización de la protesta convierta las calles en una batalla campal.

El Ayuntamiento de Barcelona también ha decidido retirar muchos de los contenedores del centro de la ciudad, ante el riesgo de que puedan servir de barricadas o de hogueras.

Los comerciantes han recibido amenazas

Las fuentes empresariales de Barcelona a las que ha tenido acceso ECD denuncian también que los comerciantes del centro de la ciudad han recibido amenazas en los últimos días de actuar contra sus establecimientos si no secundan la protesta y no se suman a la manifestación.

Han tenido conocimiento de acciones violentas y destrozos que se pudieran llevar a cabo contra sus negocios, por lo que han solcitado un refuerzo de la seguridad en sus comercios para esta tarde.

Batalla campal en la última huelga general

Hay que recordar que la manifestación que recorrió el centro de la capital catalana, la tarde de la pasada huelga general del 29 de marzo, desembocó en una batalla urbana en la que se destrozaron escaparates, se quemó un establecimiento utilizando contenedores ardiendo como barricadas y los Mossos respondieron con cargas y botes de humo para dispersar a los alborotadores.

Los enfrentamientos entre los Mossos y los manifestantes se fueron recrudeciendo conforme iba avanzando la cabecera de la manifestación. Como resultado, el interior del Starbucks de plaza Urquinaona fue pasto de las llamas y los concentrados llegaron incluso a abuchear a los bomberos que intentaban sofocar las llamas.

Otro establecimiento destacado atacado fue la tienda Zara de la confluencia entre Gran Via y paseo de Gràcia.