¿Es posible aumentar a 140 km/h la velocidad en las autopistas?

El debate sobre la velocidad máxima en nuestras carreteras ha vuelto a estar de plena actualidad. El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, aseguró que su departamento estudiaría la posibilidad de ampliar hasta 140 km/h el límite existente en las autopistas y autovías del Estado pero, ¿es realmente posible este cambio?

Para responder a esta pregunta, hay que tener en cuenta una serie de factores, como las sensaciones del conductor al volante, la experiencia en otros países europeos, la preparación de nuestras infraestructuras, y las posibles consecuencias para el medio ambiente.

La mayoría de los conductores ya circula a más velocidad de la permitida

Según Jordi Jané, portavoz de CiU en la Comisión de Interior del Congreso de los Diputados y una de las personalidades políticas que más ha reivindicado este cambio, la ampliación del límite de velocidad en las carreteras españolas es una iniciativa factible y necesaria, ya que en la actualidad la mayoría de conductores sobrepasa el ‘tope’ actual de 120 kilómetros por hora porque considera insuficiente el margen establecido por la Dirección General de Tráfico.

El diputado catalán ha declarado en repetidas ocasiones que “si el conductor no cree en la velocidad máxima actual, es muy probable que no la acepte y tome su propia decisión; esto es algo que podemos ver diariamente en cualquier vía”.

En Alemania y Holanda la fórmula ha funcionado

En Alemania hay grandes tramos de vía sin límite de velocidad. En Francia, se puede circular a 130 kilómetros por hora. Polonia y Holanda han elevado sus límites recientemente; y el Gobierno del Reino Unido ha anunciado su intención de hacerlo para dar un empujón a su economía.

En todos estos países, el índice de mortalidad en las carreteras es menor que en España donde, no obstante, las cifras de fallecidos han descendido en los últimos años, gracias, sobre todo, a la construcción de carreteras más seguras y modernas.

Según la oficina europea de estadísticas Eurostat, los países que mejor han evolucionado con respecto a la seguridad en carretera son, precisamente Reino Unido, Alemania, Francia y Holanda. España y Portugal también están entre los países con menos mortalidad en autopistas y autovías de la UE.

Las distracciones al volante y la ausencia del cinturón, más mortales que la velocidad

Los datos estadísticos que maneja la propia Dirección General de Tráfico apuntan a que el grueso de los accidentes en autopista y autovía no están causados por el exceso de velocidad sino por las distracciones al volante (el 42 por ciento) y la ausencia de cinturón (26 por ciento).

Además, el 72,8 por ciento de las victimas mortales se produce en carreteras convencionales, y no en las autopistas y autovías donde se puede circular a la máxima velocidad permitida.

El coche eléctrico puede ser la clave para que la medida se aplique en España

Uno de los argumentos más utilizados durante los últimos años para rechazar una ampliación de la velocidad máxima en las carreteras españolas ha sido el riesgo para el medio ambiente que esta iniciativa provocaría.

Según Ecologistas en Acción, la medida supondría “un importante despilfarro de combustible, un aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero, e incremento de las emisiones de contaminantes que tanto afectan a nuestra salud”.

En contraposición a estos argumentos, los expertos automovilistas consultados aseguran que la instauración paulatina del coche eléctrico en nuestro país acercará la aprobación de una ley que amplíe el límite de velocidad hasta los 140 kilómetros por hora.

De hecho, en países europeos como el Reino Unido, el nuevo límite de velocidad de hasta 130 km/h sólo será aplicable para aquellos usuarios que tengan este tipo de coche: “En España se podría hacer lo mismo con vehículos nuevos, menos contaminantes, o con los eléctricos. Esa sería una solución intermedia que gustaría a todos”, afirman los expertos.

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