La incógnita de Teresa, la mujer de John Kerry, protagonista indeseada en la Convención del Partido Demócrata

La fuerte personalidad de Teresa Heinz Kerry, esposa del nominado candidato a la Presidencia de los Estados Unidos, es una de las incógnitas en el futuro electoral de John Kerry, después de que su actitud marcara en parte la celebración de la Convención Demócrata. Uno de los problemas surgió por el enfrentamiento que mantuvo con un periodista, al que espetó en público un “cierra la boca” que ha sido muy comentado en los restantes medios acreditados en la Convención. Algunos comentaristas políticos se preguntan sobre ese carácter incontrolable de Teresa y la influencia que puede tener en la candidatura de su marido.

El destinatario fue un reportero de un diario local de Pittsburg, que le formuló algunas preguntas sobre cuáles eran sus planes. “Tú has dicho una cosa que yo no he dicho”, le espetó la señora Kerry, que a continuación abandonó bruscamente el lugar. Una escena ampliamente recogida en las cadenas de televisión.

“Yo digo lo que pienso. No tengo una lengua de madera”, replicó al día siguiente la protagonista, para intentar justificar su actitud.

De 65 años, portuguesa de origen, riquísima heredera del emporio agroalimentario Heinz tras la muerte de su primer marido en accidente aéreo, Teresa nació en el Mozambique colonial. Volcada desde hace un año en la campaña, aporta a su marido la espontaneidad y originalidad que John Kerry no tiene, aunque a veces sus afirmaciones no han sido “políticamente correctas”.

En el pasado, comparó el régimen castrista con el “apartheid” en Sudáfrica, y en los años 70 criticó al hoy principal protector político de su marido, Ted Kennedy, diciendo que seguía casado con Joan sólo para mantener el voto de los católicos. (02-08-2004)