El accidentado estreno del nuevo helicóptero medicalizado del Gobierno vasco: ‘roces’ con la Ertzaintza, sólo actuará de día y no tiene material de rescate
A principios de febrero, el Departamento de Sanidad del Gobierno Vasco presentó un helicóptero medicalizado que prestará servicio para toda la Comunidad Autónoma. Sin embargo, sólo puede realizar misiones a la luz del día, no dispone de material de rescate básico y hay problemas con la Unidad de helicópteros de la Ertzaintza.
El estreno operativo del helicóptero sanitario ocurrió el 4 de febrero pasado en la Sierra de Aralar (Guipuzcoa). Personal de la Osakidetza ha relatado a El Confidencial Digital cómo un esquiador tuvo que ser rescatado en circunstancias poco favorables: había sufrido heridas, estaba inmovilizado en un lugar de difícil acceso y se encontraba aislado por la nieve.
Se dio la voz de alarma y, en primer lugar, partió de su base en Iurreta (Vizcaya) un helicóptero de la Ertzaintza, además de que otros agentes se desplazaron por tierra al lugar donde se encontraba el lesionado para auxiliarle. El rescate se realizó con la aeronave empleando una grúa para el izado del herido.
La sorpresa de los rescatadores fue grande cuando, tras dar parte de la operación el helicóptero de la Ertzaintza, estos recibieron la orden de tomar tierra de inmediato en la cercana localidad de Amezketa. El motivo del obligado aterrizaje era forzar que la recién estrenada aeronave de Osakidetza se hiciera cargo de la víctima.
El helicóptero sanitario realizó la evacuación hasta el complejo hospitalario de San Sebastián, que carece de helipuerto, por lo que tuvo que realizar el aterrizaje en Miramón –unas instalaciones cercanas a la televisión vasca- y desde allí trasladaron al herido en ambulancia hasta el servicio de urgencias del hospital donostiarra.
Cuentan las mismas fuentes que, hasta aquel 4 de febrero, los heridos eran trasladados directamente en el helicóptero policial, junto con personal sanitario a bordo. Los propios agentes vascos poseen material adecuado (camilla, inmovilizadores, desfibrilador, etc.) y conocimientos suficientes como para realizar este tipo de operaciones de rescate.
Según fuentes oficiosas del Gobierno Vasco consultadas por El Confidencial Digital, el estreno del helicóptero no ha tenido una buena aceptación después de su puesta en escena real durante aquel rescate en Guipúzcoa. A continuación describimos algunas de las valoraciones realizadas tras esta intervención:
-- El primer problema que la aeronave sólo puede trabajar en condiciones de luz natural y meteorológicas óptimas.
-- Sólo un Hospital de la red sanitaria de la Osakidetza cuenta con helipuerto: el de Galdácano. El resto de operaciones tendrán necesariamente que recurrir a intermediarios como ambulancias para el traslado de heridos.
-- Mantener el servicio aéreo supone no sólo duplicar las tareas con la Ertzaintza que ha realizado numerosas intervenciones anteriores con éxito, sino que resulta, además, muy caro: alrededor de un millón y medio de euros anuales.
-- El helicóptero de la Osakidetza no está dotado de material para rescatar heridos como grúa de izado, camilla o cesta de rescate.
-- La Ertzaintza realiza este servicio de evacuación desde 1986, con resultados satisfactorios y dispone de medios suficientes para desarrollarlo: cuenta con cuatro aeronaves –una más se entregará a la Ertzaintza en los próximos meses- y miles de horas de vuelo a sus espaldas.
-- Con el nuevo servicio, se ha duplicado el número de aeronaves en vuelo por rescate.
-- El aparato de la Osakidetza está pintado de color verde y azul, y “puede mimetizarse con el terreno y provocar accidentes” se advierte.
