Llega el Glovo de los abogados: una plataforma permite contratar letrados para gestión de pagos y deudas

El cliente puede encargar servicios jurídicos desde casa, los papeles llegan al juzgado a través de “riders” y cobran cuando finaliza el servicio

Fachada de unos juzgados de Madrid.

En 2020 los juzgados estuvieron parados durante tres meses debido al estallido de la pandemia. Semanas después del encierro, muchas profesiones volvieron a operar, pero en el caso de los juzgados no fue así.

Según fuentes de la empresa Plataformas Digitales para la Transformación Eficiente, (pfs) esta parálisis en los juzgados ha dejado desprotegidos a todas aquellas personas que necesitaban su amparo para un proceso judicial, como, por ejemplo, propietarios que han tenido sus casas okupadas o inquilinos a los que no se les está pagando el alquiler.  

El cálculo de pfs es que la demora media de los juzgados post covid no es de tres meses, sino de ocho a nueve, ya que, según han señalado, “hay que tener en cuenta las bajas por contagio o los confinamientos por contacto estrecho del virus”.  Además, han subrayado que de 2008 a 2020 hay procedimientos que se han duplicado o triplicado en plazo. Por ejemplo, un procedimiento de ejecución hipotecaria en el año 2008 era de 8 y 12 meses y en 2021, de 30 y 40 meses. 

Durante la pandemia se han comenzado a llevar a cabo vistas virtuales. Según han relatado a Confidencial Digital, los jueces están permitiendo en algunas ocasiones realizarlas por videoconferencia, por lo que “digitalizar los procesos agilizaría los trámites”.

Por este motivo, la empresa utiliza tres plataformas para contratar abogados y procuradores que se encarguen de todo el proceso de forma digital. Pfs ha manifestado que estas plataformas se utilizan de forma muy similar a la aplicación Glovo: un cliente entra en la aplicación y selecciona el servicio que desea, posteriormente solicita un abogado o un procurador para que le lleve el caso, la plataforma actúa como si fuera un “rider” y se encarga de enviar todos los papeles al juzgado. Una vez finalizado ese proceso, el cliente paga el “pedido”.

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Los casos más comunes que solicitan los clientes son los civiles relacionados con asuntos económicos como la gestión de pagos. 

Procura Online

En esta plataforma un cliente puede contratar a un procurador de forma online para que se encargue de recoger las notificaciones y hacérselas llegar al juez. El cliente sabe desde un primer momento lo que va a pagar porque solicita el presupuesto para el asunto concreto que quiere tratar. Posteriormente sube la documentación a la plataforma. 

Una vez disponible toda la información, pfs Servicios Legales, que es el área de asistencia jurídica de pfs, se encarga de presentar el caso en el juzgado y, posteriormente, envía al abogado el justificante. 

Pero si el cliente es una gran corporación, como un banco o una aseguradora, según pfs, la plataforma que utilizan es Procura Digital.

Recupiva

Debido al Covid, el impago de facturas se está acelerando. Autónomos y PYMES cobran cada vez más tarde, y la incertidumbre sobre la viabilidad de sus proyectos crece. Por ello, Recupiva se encarga de administrar el cobro de las facturas para que el cliente “no se preocupe de nada”, según apuntan en su web. Se inicia un procedimiento amistoso, que empieza por el envío de emails, SMS y llamadas para recuperar la deuda y acabar en un acto de conciliación. Si el deudor no quiere o no puede pagar, se inicia un procedimiento judicial para su reclamación.