El príncipe Carlos se sintió “emocionado” en su primer encuentro con Benedicto XVI junto a Camila Parker Bowles. No visitaba el Vaticano desde 1985

El Príncipe Carlos y Camila fueron recibidos el lunes en audiencia privada por el papa Benedicto XVI. El heredero de la Corona Británica se sintió ‘emocionado’ por los regalos recibidos del Papa: una medalla y un dibujo de la Basílica de San Pedro.

La de ayer fue la primera visita del Príncipe Carlos al Vaticano desde su divorcio de la Princesa Diana, excepción hecha del funeral de Juan Pablo II en 2005.

La última visita a un Papa, del que está llamado a ser cabeza de la Iglesia Anglicana, se produjo en abril de 1985, cuando Carlos de Inglaterra y Diana de Gales fueron recibidos por el Papa Wojtyla.

La pareja real obsequió al Papa con un conjunto de platos decorados con dibujos de las plantas que el Príncipe cultiva en su casa de campo de Highgrove, en el condado de Gloucester.

De acuerdo con el protocolo Vaticano, el Príncipe Carlos se reunió primero, a solas, con el Papa, y a continuación participó del encuentro, la duquesa de Cornualles, que iba vestida de negro con un velo del mismo color que cubría su cabeza.

Camila es anglicana pero se casó en primeras nupcias con Andrew Parker Bowles, de religion católica, por lo que ha educado a sus hijos en la fe católica.

La visita del príncipe Carlos y su esposa al Vaticano está enmarcada dentro de un viaje oficial que ha incluido encuentros con parlamentarios y empresarios italianos a los que dirigió un discurso sobre cambio climático, una de sus máximas preocupaciones en la actualidad, del que dijo es “la mayor amenaza a la que se enfrenta nuestro mundo”. Hoy continúan su tour por Alemania.

 

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