Enfado en el entorno de Juan Carlos I por la tercera filtración sobre sus dineros en vísperas de un viaje a España
En diciembre saltaron los 15 millones en Jersey y un año antes se prorrogó la investigación en paraísos fiscales. Sospechan de la Fiscalía y recuerdan la frase de Sánchez: “¿De quién depende…?” – “Pues eso”
- Enfado en el entorno de Juan Carlos I
- Maniobra para volver a retrasar la vuelta
- Se recuerda que la visita incomoda al Gobierno
- El dinero en el paraíso fiscal de Jersey
- Se prorrogó la investigación sobre la fortuna
- Sin cuentas pendientes en España
- Don Juan Carlos no ha sido condenado
El Gobierno ha reaccionado con cautela ante la inminente llegada de don Juan Carlos a Sanxenxo la próxima semana, aunque no oculta la incomodidad que les produce el viaje. Al mismo tiempo, existe un gran enfado en el entorno del rey emérito al comprobar una nueva filtración, la tercera, sobre sus cuentas en paraísos fiscales precisamente tras anunciarse un posible regreso.
En esta ocasión, el Ejecutivo ha optado por mostrar un perfil bajo en la reacción ante la inminencia de ese viaje, intentando rehuir el debate y trasladando toda la responsabilidad en la respuesta a Zarzuela.
Fuentes gubernamentales mantienen las distancias. Lo califican de un “viaje privado” en el “ámbito personal”, aunque esperarán a ver cómo se desarrolla la estancia para calibrar el impacto de la visita sobre la Corona.
“Todo va a depender de su comportamiento”, aseguran las citadas fuentes, con el recuerdo vivo en la memoria del “espectáculo” que se organizó en su primera incursión en las regatas de Sanxenxo, en mayo del año pasado.
Enfado en el entorno de Juan Carlos I
Horas después de confirmarse el viaje a España de don Juan Carlos, el diario El País publicó este miércoles que una ONG británica ha aceptado 10 millones de un fondo en Jersey vinculado al rey emérito. Añadía que el testamento de Joaquín Romero Maura lega a una organización de ayuda a refugiados una fortuna “de origen no aclarado”.
Según ha podido saber Confidencial Digital, de fuentes próximas al rey emérito, el entorno de Juan Carlos I ha expresado su enfado en privado por esta nueva filtración, la tercera en poco más de un año, sobre la supuesta fortuna oculta del ex jefe del Estado que una vez más aparece en la prensa justo después de anunciarse un viaje a España.
Maniobra para volver a retrasar la vuelta
Los amigos de don Juan Carlos hablan de una maniobra para intentar retrasar la vuelta, y apuntan como responsables al Gobierno y a la Fiscalía, recordando la polémica declaración de Pedro Sánchez: “¿De quién depende la Fiscalía…?” – “Pues eso”
No creen que se trate de una casualidad la aparición en prensa de una noticia negativa, sobre supuestas actividades poco ejemplares del rey emérito, precisamente a una semana de su aterrizaje en Sanxenxo; una información, por tanto, que no aconsejarían su presencia en España por la mala imagen que daría a la Corona.
Se recuerda que la visita incomoda al Gobierno
Destacan que el Gobierno ha optado ahora, externamente, por un mantener tono prudente, evitando reproducir la exigencia de que don Juan Carlos dé “explicaciones” que se ha repetido insistentemente, lo mismo que eludiendo ahora marcar distancias ante informaciones “inquietantes” y “perturbadoras” -en palabras del propio Sánchez- que han rodeado los negocios del rey emérito.
En Moncloa muestran un “alineamiento total” con Zarzuela, hablan de “buenas relaciones” entre los dos palacios, y restan trascendencia a la visita. “No es un asunto vital para nosotros”, despachan, dando a entender que no se trata de una cuestión sobre la que quieran debatir.
En privado, sin embargo, en el Gobierno siguen manteniendo que don Juan Carlos debería dar explicaciones, si bien ahora miden al detalle sus pronunciamientos públicos.
El dinero en el paraíso fiscal de Jersey
En el entorno de Juan Carlos I tampoco pasan por alto la información que publicó El País el pasado diciembre, en vísperas de un posible viaje del rey emérito en Navidad, en la que se contó que diez bancos y administradores diferentes manejaron sin cuestionar su procedencia, en el paraíso fiscal de Jersey (islas del Canal), 15 millones de euros cuyo único beneficiario durante ocho años fue Juan Carlos I cuando era jefe del Estado.
Así se desprendía, según el diario de Prisa, de las investigaciones internas de estas compañías y de las pesquisas archivadas en marzo anterior por la Fiscalía Anticorrupción.
Se aseguraba también que los gestores habían mostrado sus dudas e incomodidad, ordenaron investigaciones internas, e incrementaron sus tarifas por el riesgo reputacional.
Se prorrogó la investigación sobre la fortuna
La Navidad anterior ya se había descartado el regreso del rey emérito a España, después de que la Fiscalía prorrogara, a principios de diciembre de 2021, por otros seis meses una de las tres líneas de investigación abiertas sobre la supuesta fortuna del anterior jefe del Estado en paraísos fiscales.
La intención inicial de la Fiscalía era dar carpetazo a las diligencias ese mismo diciembre, al considerar que la inviolabilidad, la prescripción y las excusas absolutorias -por sus regularizaciones fiscales- hacían inimputable al rey emérito.
Sin embargo, la decisión final terminó por aplazarse. Y, con ese decreto, se mantuvo abierto dos meses más un caso cuyos primeros pasos en la Fiscalía Anticorrupción se remontaban a 2018.
Sin cuentas pendientes en España
En el entorno del rey Juan Carlos insisten a ECD en que la Agencia Tributaria cerró en noviembre pasado la inspección que mantenía abierta por las cacerías a las que había sido invitado entre junio de 2014 (cuando abdicó el trono) y 2018. El representante legal del anterior jefe del Estado firmó un acta de conformidad y abonó la correspondiente sanción.
La inspección cerrada en aquel momento era el último fleco de sus problemas con el fisco, y se refería a un asunto en apariencia menor, aunque con un potencial demoledor, pues podía reabrir vías de agua laboriosamente taponadas durante los últimos años.
En efecto, si se concluía que las dos regularizaciones anteriores no fueron “veraces y completas”, quedarían invalidadas, con lo que se reabriría la vía del delito fiscal.
La única causa abierta que se conoce hoy contra Juan Carlos I en una sala de justicia es la demanda por acoso interpuesta en Londres por su ex amiga Corinna Larsen. Se trata de un pleito civil en el que el rey emérito no se enfrenta a una pena de cárcel, aunque sí al pago de una indemnización.
Don Juan Carlos no ha sido condenado
El rey Felipe VI sostiene, y así lo dijo expresamente a Pedro Sánchez cuando el presidente se pronunció hace unos meses contra un viaje a España desde Abu Dabi, que su padre “no ha sido condenado”, no tiene causas pendientes con la justicia, y le han reconocido la inmunidad en el Reino Unido. Por tanto, no existe motivo para que se vete su presencia en su país.
Se recuerda que, con ocasión de los funerales de Isabel II y los de Constantino de Grecia, el rey emérito ya coincidió con Felipe VI y doña Letizia, y hasta compartió con ellos banco en la abadía de Westminster, en Londres.
