La imputación de la infanta Cristina no fue una sorpresa para la Casa Real
La Zarzuela tiene la última palabra sobre la decisión de recurrir. El auto del juez Castro no concreta cuándo fue el delito fiscal y de qué cuantía
La decisión del juez José Castro de imputar a la infanta Cristina no constituyó ninguna sorpresa para el Palacio de la Zarzuela, que ya lo esperaba. Y será la Casa Real quien tendrá la última palabra sobre la presentación de un recurso ante la Audiencia de Palma, que ya rechazó la imputación en la anterior ocasión.
No hubo sorpresa alguna ayer en La Zarzuela, cuando se anunció el auto del juez instructor del 'caso Urdangarín' imputando a la infanta Cristina, según pudo constatar El Confidencial Digital a primera hora de la mañana, nada más conocerse la noticia.
El equipo de la Casa del Rey, que encabeza Rafael Spottorno, ya se esperaba que la decisión de José Castro sería la imputación, a la vista de los antecedentes y las actuaciones pasadas del magistrado, quien ya había anunciado que la daría a conocer el 7 de enero, como así ha ocurrido.
"Respeto"
La única reacción oficial ayer fue afirmar que desde la Casa del Rey se "respetaba" la decisión judicial.
El trasfondo de ese postura, que contrasta con lo que ocurrió la primera vez, cuando mostró "su sorpresa" por la imputación, está relacionada con la preocupación existente en La Zarzuela por las insinuaciones de que la Casa del Rey estaba mediatizando el trabajo de la justicia y presionando, a diversos niveles, para que la infanta Cristina saliera libre del 'caso Urdangarín'.
Ese clima de opinión inquieta en La Zarzuela, por las consecuencias que puede tener el que realmente se crea que existen presiones.
Seis meses más
La impresión en los ámbitos próximos al Palacio de La Zarzuela es que el paso dado por el juez Castro supondrá seis meses más de retraso en el sumario, cuando el deseo de la Casa, tal como expresó Rafael Spottorno en Televisión Española, es que se cierre cuanto antes, después de tres años de instrucción que ha sido -dijo- "un martirio".
Dada la trascendencia del asunto, la decisión final sobre la presentación del recurso contra la imputación será de la propia Zarzuela, a pesar de las opiniones discrepantes vertidas por los abogados de la infanta Cristina, Miguel Roca (a favor de presentarla) y Jesús Silva (abrió la puerta a que no se presente).
El cálculo de los seis meses tiene que ver con la intervención de la Audiencia de Palma, que primero tendrá que admitir los recursos, luego suspender la declaración del 8 de marzo fijada por el juez Castro, y finalmente tomar una decisión definitiva sobre si mantiene o no la imputación.
Un delito fiscal inconcreto
Sobre los dos delitos que se imputan a la infanta, fuentes jurídicas consultadas por ECD ponen algunas reservas a la acusación formulada por el juez instructor.
Respecto al delito fiscal, echan de menos en el auto que se concrete cuándo se produjo, un dato muy relevante porque ese tipo de delitos prescriben a los cinco años.
Y tampoco expresa, a pesar de los tres años de instrucción, por qué cantidad se ha producido el hecho delictivo, otro dato clave porque para la existencia de delito fiscal se exigen 120.000 euros al año.
Blanqueo de capitales
En cuanto a la acusación de blanqueo de capitales, las citadas fuentes explican que para que exista es preciso que la persona afectada 'conociera' que los fondos manejados por Aizóon tenían esa procedencia ilícita.
No basta con que manejara los fondos, con que los utilizara, que es una evidencia, sino que hay que demostrar ese conocimiento, algo que el auto no aclara, y sin que sea suficiente la acusación de "mirar hacia otro lado".
