Los mandos militares en Afganistán exigen ya los nuevos 8x8 que Defensa ha paralizado. Los RG-31 vuelcan y no son apropiados para la orografía

Nuevas quejas por las carencias materiales que sufre el contingente español en Afganistán. Primero fueron los obsoletos y poco seguros BMR. Ahora, los modernos RG-31. Los mandos militares han transmitido a Defensa que estos vehículos –al igual que los Lince- no son los más apropiados para el terreno afgano. Piden que el Gobierno agilice la llegada de los nuevos 8x8, pero el ministerio ha paralizado el concurso de adquisición del blindado.

La principal demanda de los altos mandos destacados en Afganistán, la de aumentar la seguridad de las tropas, quedó satisfecha con la llegada de los nuevos MRAP RG-31 ‘Nyala’, un vehículo con blindaje reactivo capaz de resistir a los artefactos explosivos con los que los talibán llevan a cabo sus emboscadas y atentados.

Sin embargo, la complicada y agreste orografía del terreno afgano ha supuesto un reto no superado para el RG-31, al igual que para los MLV ‘Lince’. Fuentes militares confirman a El Confidencial Digital que estos blindados, pese a suponer una importante mejora en materia de seguridad para las tropas españolas, no son los vehículos más apropiados para patrullar por las carreteras –casi nunca asfaltadas- del país centroasiático. A pesar, incluso, de que Defensa ha mejorado la suspensión de los RG para adaptarla a Afganistán.

Estas fuentes no descartan que se vuelvan a producir más episodios de vuelcos con el RG-31, debido a que el vehículo “no es un todoterreno y su centro de gravedad está muy alto”. Según su visión, las especificaciones del terreno afgano hacen necesario un vehículo mucho más versátil, “como los 8x8”. Algo similar -salvando las distancias- ocurre en Líbano.

No obstante, el concurso para la adquisición del 8x8 está en el aire por los recortes presupuestarios en Defensa. En febrero, el secretario de Estado, Constantino Méndez, anunció la inminente elección del consorcio encargado de fabricar el nuevo blindado de ocho ruedas. Sin embargo, tal y como publicó El Confidencial Digital en un sondeo entre las empresas que optan al concurso, la decisión va con mucho retraso ver noticia-.

Desde el ministerio se prometió que habría una respuesta después de Semana Santa, pero aún no ha llegado. Tal y como reconocieron a este confidencial algunas de las empresas aspirantes a fabricar el 8x8, estos retrasos están generando una sensación de “intranquilidad” en el sector, ya que para algunas de las compañías implicadas este proyecto es de vital importancia para el futuro.

Se buscan soluciones

El proyecto 8x8 necesita nuevas vías de financiación. Y Defensa ya ha diseñado estrategias para quitarse ese ‘peso’ de encima, que pasan por trasladar parte del coste al ministerio de Industria en concepto de inversiones en I+D+i. Está por ver la respuesta del departamento de Miguel Sebastián, afectado como todos por el recorte estatal en inversiones públicas.

En caso de fallar la vía de Industria, en Defensa se manejan otras fórmulas, que ya se han utilizado para adquirir por procedimiento de urgencias diversos equipos materiales de inminente necesidad, como los nuevos inhibidores para los RG-31.

Para estos casos, existe un capítulo especial al que derivar los gastos. Se trata del Programa 122M, de gastos operativos de las Fuerzas Armadas generados por la participación en misiones de paz, como la de Afganistán o Líbano.

 

Otra de las opciones, que ya adelantó El Confidencial Digital, es la que propone el consorcio GTD-Nexter. El grupo franco-catalán contempla la posibilidad de ceder a España en alquiler los VCBI que está fabricando por encargo para el Ejército francés. El coste de esta operación de leasing rondaría los 140 millones de euros. Una operación que Defensa contempla “con buenos ojos”, según ha podido saber ECD.

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