El encargo de cinco Buques de Acción Marítima garantiza a Navantia tarea hasta 2016 y 6.000 puestos de trabajo en Cádiz, la circunscripción electoral de Rubalcaba

El Consejo de Ministros tomó el viernes una decisión fundamental para salvar la operatividad de la Armada en las misiones más domésticas como la vigilancia costera. Un acuerdo clave para despejar el futuro de los astilleros de Navantia y que, además, es muy importante para los intereses electorales del PSOE.

El Gobierno autorizó a Defensa a preparar un nuevo programa de construcción de cinco Buques de Acción Marítima (BAM), que servirán a la Armada para cubrir las bajas que dejan los viejos patrulleros, y a los astilleros de San Fernando-Puerto Real para asegurarse la carga de trabajo hasta 2016 y unos seis mil puestos de trabajo directos e indirectos en Cádiz.

Cádiz es la circunscripción electoral por la que es diputado el vicepresidente primero del Ejecutivo, Alfredo Pérez Rubalcaba. Y ese anuncio se produce a dos meses de las elecciones municipales.

Problemas para vigilar las costas

El acuerdo, que cuando se haga realidad será el primer gran programa de modernización en Defensa que promueve un Gobierno de Rodríguez Zapatero, se ha acogido con alivio en el estado mayor de la Armada.

Sin barcos para cubrir las bajas de los patrulleros más antiguos –algunos con más de 30 años de servicio-, y con los retrasos acumulados para recibir los primeros cuatro BAM encargados en 2006, la falta de medios amenazaba las misiones de vigilancia de costas y de protección de los intereses marítimos nacionales.

Defensa tiene ahora cuatro meses para diseñar el programa de los nuevos cinco BAM. Tres de ellos se construirán en versión patrullero, uno como buque de salvamento y rescate, y otro para investigación oceanográfica.

Con 93 metros de eslora, 2.575 toneladas de desplazamiento, una tripulación de 35 hombres y capacidad para transportar otros tantos, los BAM son más grandes y tienen más capacidad operativa que los viejos patrulleros. Sirven para vigilar las costas y para protección en aguas lejanas, como en misiones del tipo Atalanta.

La ayuda permanente de Rubalcaba

El PSOE siempre tuvo un interés muy especial en el programa. La diputada socialista por Cádiz Carmen Sánchez presentó una enmienda a los presupuestos generales del Estado, el pasado mes de septiembre, que sirvió para incluir una partida de 33 millones de euros destinados al proyecto de los BAM en los astilleros gaditanos.

 

Sánchez presumió en su blog de la “ayuda permanente de Alfredo Pérez Rubalcaba” y se hizo una foto con Carme Chacón en el Ministerio de Defensa como impulsora de las inversiones para su tierra. La enmienda fue aprobada. Los encargos y el desarrollo de submarinos (Cartagena) y fragatas (Ferrol) que también tiene Navantia no han recibido el mismo impulso.

La ministra viajó el lunes a Cádiz para presidir la entrega del BAM ‘Tornado’, cuarto de los construidos según el programa de 2006. La titular de Ciencia e Innovación, Cristina Garmendia amadrinó el buque.

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