Cuarenta millones para construir un aeropuerto de drones que no podrán volar
Se financiará con fondos FEDER, que prohíben el uso militar de las instalaciones. La AESA ha prohibido todo vuelo con aviones no tripulados
Se trata de uno de los proyectos de innovación tecnológica más ambicioso de la Junta de Andalucía, pero nace cojo. La presidenta Andaluza Susana Díaz está impulsando la creación de la gran base de de vuelos experimentales de UAV, en El Arenosillo (Huelva), mientras la Agencia Española de Seguridad Aerea asegura que los drones civiles tienen prohibido el vuelo.
Tras la inauguración del centro ATLAS en Jaén –unas instalaciones de experimentación con UAVs ligeros-, Susana Díaz aseguró que el proyecto “posiciona a Andalucía como uno de los grandes puntos de referencia de la aeronáutica europea”. Y es sólo el principio, porque tal y como anunció el Ejécutivo andaluz en 2013, las obras del otro ‘macroproyecto’ de investigación en drones comenzará su construcción en los próximos meses.
Se trata del Proyecto CEUS, el Centro de Experimentación de El Arenosillo (Huelva), que está siendo impulsado por la Agencia de Innovación y Desarrollo de Andalucía (IDEA, involucrada en el escándalo de los EREs), el Ministerio de Economía y el INTA –como agente representante del Ministerio de Defensa-.
El coste total del proyecto asciende a 40 millones de euros. Nueve de ellos saldrán directamente de las arcas de la Junta de Andalucía, mientras buena parte del resto se cubrirá con Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER), destinados a impulsar iniciativas económicas en zonas deprimidas de la Unión Europea.
Sin embargo, en el sector aeronáutico existen voces discordantes con el proyecto, al que atribuyen ciertas “sombras”: por ejemplo, la imposibilidad de utilizar estas instalaciones con fines militares, al estar financiadas con fondos europeos destinados al desarrollo civil.
Las instalaciones de El Arenosillo quedarán, por tanto, reservadas únicamente a vuelos con UAV experimentales de tipo civil. Unos drones que “no existen” en la actualidad, aseguran fuentes del sector. La pista de Huelva está diseñada para aeronaves de hasta 15 toneladas, y pensadas para drones medios o pesados –de más de 650 kilogramos-. “No existe ningún fabricante que produzca este tipo de aviones para uso civil, sólo para militar” aseguran.
Defensa también colabora en el proyecto con la cesión de las instalaciones y una inversión de alrededor de 2 millones de euros, que irá destinada a la construcción de una torre de control. Una inversión que no está incluida en los presupuestos del departamento de Morenés.
Prohibido el vuelo de drones civiles
La Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) también ha asestado un duro golpe a este proyecto de 40 millones de euros al anunciar recientemente que el vuelo de drones civiles está, de momento, prohibido en España.
La entidad, responsable de controlar el espacio aéreo, recordó recientemente que el marco legal actual impide el uso de estos aparatos. Y aún no hay fecha determinada para la entrada en vigor de la normativa que regulará su utilización. Por tanto, los drones civiles de El Arenosillo no podrán volar hasta que la AESA no certifique al operador de la base.
