El Ejército investiga al General que utilizó un helicóptero militar para ir a las Fallas
El uso de recursos públicos para fines privados puede derivar en un expediente disciplinario. La unidad argumentó en un primer momento que el vuelo había tenido como objetivo visitar la base de la UME
El viaje del General jefe de las FAMET a Valencia en un Cougar puede tener consecuencias disciplinarias. El Ejército de Tierra ha iniciado una investigación, paralela a las revelaciones de El Confidencial Digital, para determinar si se incurrió en una irregularidad.
Según fuentes militares del Ministerio de Defensa, a las que ha tenido acceso ECD, en el Ejército de Tierra se ha iniciado una investigación sobre las circunstancias y detalles que rodearon el vuelo a Valencia del General García Blázquez en un helicóptero Cougar de las Fuerzas Aeromóviles del Ejército de Tierra.
Se trata de determinar si se incurrió en una irregularidad basada en el uso de recursos públicos para fines privados. ECD desveló la pasada semana que el General visitó la base de Bétera y el personal de las instalaciones fue informado de que se trataba de un “viaje particular”. “El General no viene a visitar la Unidad, sino a la mascletá y a comerse una paella, y se irá por la tarde”, les dijeron.
Al personal de la base se le trasmitió aquella mañana del 15 de marzo que se debía preparar todo para la llegada, en torno a las 11 de la mañana, de un Cougar con matrícula ET-601 e identificador de radio OMEGA-1.
Traslado a Valencia en una Mercedes Vito
A la hora prevista, con el personal esperando la llegada de la aeronave, el Cougar tomó tierra en Bétera y quedó estacionado en el parking número 8 del aeródromo.
El General jefe de las FAMET fue recibido por mandos del Batallón de Helicópteros de Emergencia II y posteriormente trasladado a Valencia a bordo de una furgoneta Mercedes Vito, que forma parte de la flota de vehículos oficiales de la base. Al volante iba un militar de tropa de la unidad. En la zona del maletero, explicaban las fuentes consultadas, había equipaje con ropa civil.
Una foto en el Ateneo Mercantil de Valencia
Tal y como desveló posteriormente El Confidencial Digital, el destino final del general –al que le acompañaban otros mandos de la unidad- era el Ateneo Mercantil de Valencia, una institución de gran arraigo en la ciudad y con una ubicación privilegiada para presenciar el espectáculo pirotécnico de las mascletás valencianas.
Este hecho quedó atestiguado por una serie de fotografías en las que se puede ver al General García Blázquez posando en un photocall de la azotea junto a otros oficiales de las Fuerzas Aeromóviles del Ejército de Tierra. Una de esas fotos fue publicada por ECD.
Vuelo de vuelta a Madrid
Posteriormente, la comitiva retornó a la base y el Cougar tomó la ruta de regreso a Madrid en torno a las cinco y media de la tarde.
En total, explican las fuentes consultadas, el tiempo de operación de la aeronave fue de unas cuatro horas –entre horas de vuelo y el encendido de los motores-. Se calcula, según personal de las FAMET consultado, que el coste del combustible de cada hora de operación de un helicóptero modelo Cougar asciende a unos 1.800 euros. Por tanto el importe total del vuelo de ida y vuelta habría sido de unos 7.200 euros.
Una visita a la UME
Según ha sabido El Confidencial Digital, desde que el Ejército de Tierra tuvo conocimiento de estos hechos se pidieron explicaciones a la unidad del General García Blázquez para valorar la gravedad de los hechos.
En un primer momento, y según los datos que ha podido obtener ECD, la versión interna apuntaba a que el vuelo había tenido como objetivo una visita a las instalaciones de la Unidad Militar de Emergencias (UME) en la base ‘Jaime I’ de Bétera.
En esa visita, según esta primera versión, se habrían tratado asuntos relacionados con futuros ejercicios conjuntos entre las FAMET y la UME, así como cuestiones de adiestramiento de ambas unidades. En ningún momento, subrayaba esa versión, se produjo visita alguna a la capital valenciana para acudir a una mascletá.
Esta versión quedó en entredicho poco después tras la aparición de la fotografía en la que aparece el General y sus acompañantes en la azotea del Ateneo Mercantil de Valencia.
La situación ha creado un intenso malestar entre el personal de las FAMET. Algunos de los militares consultados por ECD durante la investigación de los hechos recuerdan que “la inmensa mayoría de los militares españoles respetan las reglas y se entregan a diario a su trabajo”, pero asumen que denunciar este tipo de situaciones es una cuestión “de higiene democrática”.
Otras fuentes recuerdan que las Fuerzas Armadas “son una organización humana, y como tal, puede cometer errores”. Y añaden: “estas situaciones deben aclararse para evitar que afecte a la buena imagen de la institución”.
