La Guardia Civil ‘se arma’ para desactivar explosivos en el extranjero
El Ejército de Tierra busca comprar dos robots con brazo articulado, cañón disruptor y detectores químicos y biológicos para los Tedax del Instituto Armado
El Servicio de Desactivación de Explosivos de la Guardia Civil amplía su ‘armamento’ para las misiones internacionales, en las que participa en solitario o con las Fuerzas Armadas. Esta unidad de artificieros va a incorporar dos robots desactivadores de artefactos por control remoto que irán destinados a misiones internacionales.
Algo más de 3.000 militares españoles se encuentran destinados en el extranjero, en las distintas misiones internacionales de las Fuerzas Armadas de mantenimiento de la paz, de instrucción, de control migratorio y con otros fines.
Según los datos del Estado Mayor de la Defensa del pasado mes de mayo, entre esos tres millares de efectivos había también un pequeño grupo de 36 agentes de la Guardia Civil. El Instituto Armado lleva años participando en misiones en el exterior: ha estado en Haití, Kosovo, Afganistán... y ahora tiene destacados a miembros en Líbano, Colombia (por el desarme de las FARC), Senegal, Malí, Mauritania y otros destinos.
El Confidencial Digital ha podido comprobar que precisamente para estos despliegues fuera de España la Guardia Civil pretende incorporar dos robots de desactivación de explosivos. Los va a comprar por un máximo de 484.000 euros el Ejército de Tierra, a través de la Jefatura de Asuntos Económicos del Mando de Apoyo Logístico.
Irán destinados a las unidades del Sedex, el Servicio de Desactivación de Explosivos de la Guardia Civil, para que los utilice específicamente en misiones internacionales. El primer intento para comprarlos ha resultado infructuoso, ya que el expediente de contratación ha quedado desierto debido a que ninguna de las ofertas presentadas cumplía con exactitud las características técnicas exigidas por el Servicio de Armamento del cuerpo, por lo que se tendrá que convocar otra licitación pública.
La Guardia Civil quiere que estos dos robots sirvan tanto para manipular paquetes sospechosos de contener explosivos, como para abrir vehículos como turismos, vehículos pesados...
Para ello, habrán de contar con un brazo articulado con suficiente grado de libertad como para hacer un buen número de movimientos, y unas palas móviles en la parte delantera para sortear osbtáculos y cargar objetos. También irán equipados con un cañón disruptor de ataque ligero, del calibre 27 mm, que sirve para neutralizar elementos peligrosos de los artefactos explosivos.
Los guardias civiles del Sedex también podrán utilizar un “kit NBQ”: es decir, de lucha contra armas nucleares, biológicas y químicas. Incluirá sensores químicos y radiológicos.
