La Armada eleva a 50 años la edad máxima para servir en submarinos por la llegada de los S-80
El objetivo es retener dos años más a los militares más veteranos para que dé tiempo a formar a las nuevas tripulaciones
La Armada Española se encuentra inmersa en un proceso de transición en lo que respecta al arma submarina. Cuenta con tres unidades de la clase Galerna S-70, operativos desde los años 80, y ya necesitados de relevo.
El modelo sustituto es el S-80, cuyo primer submarino (el S-81), pese a los retrasos, podría estar listo a lo largo de 2019. Además, Navantia tiene previsto iniciar la construcción del S-82 y el S-83, que se solaparía con el final de los trabajos del S-81 mencionado.
En esta etapa de transición entre uno y otro modelo, la Armada ha tomado una decisión para favorecer la transmisión de conocimientos ante la entrada en funcionamiento de los submarinos de la clase S-80.
Confidencial Digital ha podido consultar una resolución del Almirante Jefe de Estado Mayor de la Armada (Ajema) que eleva la edad de embarque en submarinos, precisamente justificada por la situación de cambio de modelo a la que se enfrenta el Arma Submarina.
De 48 a 50 años
La resolución del máximo responsable del Ajema implica que “se establece la edad límite para permanecer embarcado en submarinos en la edad de cincuenta años”. Hasta ahora, el reglamento para el personal de submarinos establecía que, “como norma general, el personal embarcado en submarinos deberá cesar a bordo al cumplir la edad de cuarenta y ocho años”.
El límite de 48 años se fijó en 2009, cuando ya se elevó desde el anterior tope máximo de 45 años. Entonces, el motivo para ampliar la edad límite del personal de servicio en submarinos era que existía un problema de cobertura de plantillas, sobre todo en los suboficiales que ascendían a brigada, y por eso la Armada decidió subir de 45 a 48 para mantener a efectivos en servicio.
Ahora, la Armada aprueba una nueva subida a 50 años “para asegurar una transición adecuada del personal submarinista con mayor experiencia hacia el nuevo personal, que permita una correcta transmisión de conocimientos, así como mantener una masa crítica de este personal” en medio del citado proceso de transición que conducirá a la entrada en servicio de los nuevos submarinos S-80.
También justifica la decisión del Ajema en que “las mejoras en las condiciones psicofísicas de los miembros de la Armada debido a la obligatoriedad de superación de reconocimientos médicos periódicos, los preceptivos reconocimientos previos a las misiones de las Unidades y la obligatoriedad de superar las pruebas físicas periódicas, favorecen este aumento del límite de edad” de 48 a 50 años para ser destinados a un submarino.
De esta forma, los militares de la Armada que sirvan en submarinos y estén próximos a cumplir 48 años seguirán hasta los 50, y así podrán aún formar a las nuevas tripulaciones en estos años de transición en que ese espera recibir las primeras unidades de la clase S-80.
