Las concesiones para la equiparación salarial de policías indignan ahora a los suboficiales de las Fuerzas Armadas

La equiparación salarial de policías nacionales y guardias civiles con los agentes de las policías autonómicas ha provocado que otros colectivos de empleados públicos exijan también una subida de sueldo: bien para igualarse a homólogos de determinadas comunidades autónomas, bien para cobrar lo mismo que colectivos similares.

Se han sumado los funcionarios de prisiones, los funcionarios de la Administración General del Estado, profesores de algunas comunidades autónomas...

También los militares iniciaron movimientos para reclamar una equiparación. En su caso, los suboficiales tomaron esta bandera para no cobrar menos, precisamente, que los guardias civiles y policías nacionales.

La diferencia salarial se amplía

Confidencial Digital ha podido saber, por distintas fuentes, que los últimos pasos en favor de la equiparación salarial han provocado la indignación entre suboficiales de las Fuerzas Armadas. Su enfado procede de la constatación de que su equiparación no sólo no avanza, sino que la brecha salarial se amplía.

“Si en el último informe ya estábamos muy por debajo del sueldo de la Policía Nacional o la Guardia Civil, con los acuerdos por la equiparación estaremos mucho peor”, aseguran fuentes de la Asociación Profesional de Suboficiales de las Fuerzas Armadas (ASFAPRO).

En las últimas semanas, los suboficiales han visto cómo los policías y los guardias civiles han comenzado a recibir en sus nóminas las primeras partidas del acuerdo por la equiparación salarial. Además, la Iniciativa Legislativa Popular de Jusapol, que acabaron apoyando los sindicatos de la Policía y las asociaciones de la Guardia Civil, fue aceptada a trámite por una amplísima mayoría del Congreso de los Diputados, al contar con el apoyo de PP, PSOE, Unidos Podemos, Ciudadanos...

De ahí que lamenten que el Gobierno y las Cortes sí se están implicando en favorecer la mejora de las condiciones laborales en los dos cuerpos policiales, mientras ellos se quedan atrás.

El principal motivo de queja es que no tienen noticia de un informe que, precisamente, se encargó para estudiar las diferencias salariales de los militares respecto de los policías nacionales y los guardias civiles.

El informe del Ministerio de Defensa no llega

Tal y como se contó en estas páginas el pasado mes de enero, la ministra de Defensa, que entonces era María Dolores de Cospedal, informó a las asociaciones con presencia en el Consejo de Personal de las Fuerzas Armadas (COPERFAS) que se iba a realizar un “estudio pormenorizado” de las diferencias salariales.

Con ese informe, Defensa trataría de conseguir el visto bueno del Ministerio de Hacienda para elevar los sueldos de los militares; principalmente, del grueso que son los suboficiales, y que cobran menos que los agentes de escala y categoría equivalente en la Guardia Civil -donde las categorías son muy similares- y en la Policía Nacional.

Sin embargo, las asociaciones profesionales han pedido novedades de ese informe sobre la brecha salarial respecto a las Fuerzas de Seguridad, y desde Defensa les indican que aún no está terminado y que no se puede todavía difundir y utilizar para tomar decisiones políticas.

Esta parálisis de su “equiparación”, y los avances que están viendo que benefician a los agentes de la Policía Nacional y la Guardia Civil, están provocando cierta indignación. “Esta situaciçon se va a agravar y no es sostenible en el tiempo”, destacan desde ASFASPRO sobre la diferencia de salarios en detrimento de los militares.

Por el momento cuentan con que el Ministerio de Defensa les informe de su proceso, y seguirán presionando en ese sentido, antes de plantearse movilizaciones que para los militares, por su estatus especial, son mucho más difíciles de realizar que para los policías nacionales y guardias civiles.