Denuncian a Defensa ante los tribunales por la oposición para cabo permanente del Ejército del Aire

La polémica por la oposición a cabo permanente del Ejército del Aire llegará a los tribunales. Una asociación profesional de las Fuerzas Armadas, la Unión de Militares de Tropa, ha informado a sus socios de que ha decidido “elevar a las instancias judiciales que sean necesarias” este proceso, que provocó las quejas de decenas de opositores por supuestas irregularidades.

Esta asociación puso a sus socios afectados en contacto con un bufete de abogados, Cumplido & Moreno Asociados, que les asesoró para presentar alegaciones contra el examen escrito. Las alegaciones, presentadas por vía administrativa, denunciaban lo que consideraban incumplimientos de las bases de la convocatoria.

Las supuestas irregularidades habrían sucedido en el examen celebrado en Sevilla, en el Acuartelamiento Aéreo de Tablada. Los testigos presenciales denunciaron que, contraviniendo las bases y la organización de cualquier oposición, se permitieron unos recesos durante el desarrollo de la prueba que facilitaron que algunos opositores utilizaran sus teléfonos para consultar preguntas de las partes del examen que aún tenían por responder.

Por parte de la Unión de Militares de Tropa, se han presentado cerca de 150 alegaciones. También la Asociación de Tropa y Marinería Española (ATME) facilitó a sus asociados escritos de alegaciones, y otras asociaciones de militares como Tercios Viejos Españoles (Tervies) y Militares Con Futuro (MCF) también se ofrecieron a los afectados para estudiar la opción de emprender acciones.

Ahora, los abogados que trabajan con la Unión de Militares de Tropa han decidido acudir a los tribunales (probablemente, a la jurisdicción contencioso-administrativa) para intentar anular la oposición de acceso a la condición de permanente en la Escala de Tropa del Ejército del Aire.

Desde la UMT señalan que presentarán las acusaciones contra el Ministerio de Defensa ante los tribunales, con varios argumentos.

La presunta irregularidades de mayor gravedad sería esa de que se permitieron unos recesos que algunos examinados aprovecharon para consultar las respuestas a preguntas que tenían que contestar al volver al aula.

Denuncian que algunos candidatos llegaron a llamar a sus academias, para leerles las preguntas y así poder conocer las respuestas. Otros consultaron libros y apuntes, o páginas de internet, durante esos recesos.

Además de esos y otros vicios en la vigilancia del examen, la Unión de Militares de Tropa y sus abogados concluyen que “el propio planteamiento de la prueba no se ajustaba a las bases de la convocatoria publicada por Defensa”.