Me sorprende mucho la pasividad de Jesús Quintero: protesta pero no dimite, por la entrevista de José María García que no emitió TVE

Me sorprende mucho la parsimonia de Jesús Quintero que protesta pero no dimite, que ha claudicado ante la decisión de censurar la entrevista de José María García por parte de Televisión Española.

Dice que él no participó en tal decisión y se lava las manos y la conciencia. Tampoco parece importarle que, de repente, su programa pase del miércoles al martes, el día de la semana más competitivo en la franja horaria de su programa, en un claro intento de quitárselo de en medio cuando baje, aún más, su audiencia.

No quiero defender los intereses de García, que ha aprovechado muy bien su situación, ni tampoco los de Quintero. Pero en democracia existe algo llamado libertad de expresión y se ha vulnerado de forma grave. Y Quintero lo ha consentido.

La telebasura no sólo es aquella televisión que insulta y grita más que nadie; también es telebasura la cadena y el presentador de un buen programa cuando no sabe estar a la altura de las circunstancias.