Sufro las consecuencias de las cláusulas abusivas de las hipotecas: animo a formar una asociación de afectados

Somos muchos los ciudadanos que nos encontramos atrapados por cláusulas abusivas en nuestras hipotecas que nos ofrecieron, supuestamente, para mayor seguridad pero sin explicarnos claramente su complejidad y sus consecuencias. 

Nuestra confianza se ha visto traicionada y desde que contratamos estas cláusulas (suelo, swaps o clips, seguros de amortización, etc.) nos han perjudicado como clientes muy seriamente y han beneficiado a las entidades que nos las vendieron.

En las actuales circunstancias, agravadas por los sobrecargos que en virtud de esas pólizas tenemos que pagar, la situación es asfixiante, y la codicia de los bancos resulta a menudo en la dramática situación del embargo de muchas  viviendas y con el proyecto vital de familias enteras.

Muchas familias ven incrementado sensiblemente el recibo mensual de su hipoteca como consecuencia de los productos que contrataron para su “seguridad”, algunas de ellas con alguno o todos sus miembros en paro y algunas, cada vez más,  han perdido o perderán sus casas.

Es tal la situación de indefensión en la que los consumidores nos encontramos, que aunque sabemos que somos millones los perjudicados, las entidades financieras con la colaboración de la Administración, que solícita corrió en su ayuda cuando lo necesitaron,  nos impide el acceso a las listas de clientes y saber quién está en nuestra misma situación para organizar colectivamente la defensa de nuestros intereses.

La comercialización de estos complejos  productos a consumidores domésticos es tan improcedente y somos tantos los afectados que, desde estas líneas, animo a los que estén en mi misma situación  a organizarse en Asociaciones de consumidores con el convencimiento de que unidos haremos valer nuestros derechos.