El Banco Santander planea recurrir ante el Constitucional la inhabilitación de Alfredo Sáenz. Considera que la condena provoca su apartamiento de forma definitiva
El Banco Santander intentará defender por la vía jurídica a su número dos, Alfredo Sáenz, consejero delegado de la entidad, condenado por el Tribunal Supremo a ocho meses de inhabilitación especial para cualquier empleo relacionado con la banca.
Los servicios jurídicos de la entidad que preside Emilio Botín planean, en concreto, presentar un recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional.
Fuentes del banco, a las que ha tenido acceso El Confidencial Digital, consideran que la condena de inhabilitación, aunque sea por ocho meses, si se confirma definitivamente, supone apartar “de por vida” al número dos del banco.
Según la sentencia del Supremo, Sáenz cometió delitos de presentación de una acusación falsa y de estafa procesal cuando era presidente de Banesto, y le ha condenado a inhabilitación especial para el ejercicio de la profesión de banquero, sanción accesoria que la Audiencia de Barcelona omitió incorrectamente.
En cuanto a la pena de ocho meses de cárcel, no habrá ingreso en prisión al ser una pena inferior a dos años y porque el banquero no tiene antecedentes penales.
Alfredo Sáenz podrá seguir ocupando su puesto de número dos de la entidad hasta que el Tribunal Constitucional resuelva sobre la inhabilitación para ejercer cualquier cargo dentro del sector bancario a la que ha sido condenado por el Supremo.
